Incluso con tarifas elevadas, los puntos de recarga públicos siguen teniendo demanda
2 min. lectura
Publicado: 17/03/2014 11:32
A pesar de que nos hemos acostumbrado a recargar gratis fuera de casa, poco a poco esta dinámica tenderá a cambiar según se incremente el número de coches eléctricos en nuestras carreteras.
Cuantos más coches, más competencia habrá por los pocos puntos de recarga públicos, algo que permitirá a los operadores comenzar a cobrar por sus servicios. Un ejemplo que nos permite asomarnos al futuro lo encontramos en la pequeña localidad de Naperville, Illinois. Un lugar donde hasta el momento sólo había un lugar donde los propietarios de coches eléctricos podían recargar sus baterías.
Como única oferta, la demanda era elevada. En una primera fase el uso era gratuito, lo que provocaba que algunos usuarios acaparasen el espacio durante demasiado tiempo. Después de recibir muchas quejas, el ayuntamiento decidió comenzar a cobrar, para facilitar la rotación. Pero incluso así había problemas. ¿La solución? subir todavía más las tarifas hasta llegar a 1.5 dólares cada hora conectado, unas cuantas veces el precio de la electricidad en los hogares.
Pero las colas todavía eran importantes, y los coches estacionados en las inmediaciones esperando su turno no eran pocos. Ahora el ayuntamiento ha decidido poner solución, incrementando el número de puntos hasta los tres. Algo que se espera sirva para solucionar este pequeño problema de saturación, que nos muestra que puede existir un mercado y una industria en los puntos de recarga. Un segmento que no hará más que crecer según aumenten el número de coches en las carreteras.
Por supuesto, si un operador cobra, debería tener la obligación de tener los puntos siempre operativos, e ir modernizando estas infraestructuras según lo hagan los propios vehículos, con servicios como la reserva desde un teléfono, o con mayores potencias de recarga.
Con estas premisas solucionadas, el despliegue de la movilidad eléctrica será mucho más rápida que hasta ahora.
Vía | NPVS