Taxi!!!…Anda, un Tesla Model S

Esta exclamación es cada vez más habitual en la capital noruega, Oslo. Allí cada día hay más profesionales de sector del taxi, que deciden dejar atrás sus modelos diésel, y sustituirlos por la berlina eléctrica de Tesla.

Los motivos son aplastantes en este mercado. El primero es el precio del Model S en Noruega supone poco más de 10.000 euros por encima del Passat más económico. El segundo es la disponibilidad de una buena red tanto de supercargadores, siete estaciones en funcionamiento, como de puntos de recarga en general.

Y es que como recordamos, tanto los supercargadores, como los miles de puntos de recarga públicos, son de acceso totalmente gratuito para los conductores noruegos. Esto supone que durante la vida útil del coche, el propietario de un taxi Tesla, podría no gastar una corona noruega en repostar su coche.

Si a esto le añadimos que en la versión de 85 kWh, la garantía es de nada menos que 8 años, sin límite de kilómetros, el resultado es una tormenta perfecta que como hemos dicho, cada día sea más fácil que al llamar a un taxi, aparezca la flamante berlina eléctrica americana.

Ya conocíamos a Trond Gustav, que desde octubre del pasado año recorre las carreteras noruegas con su Model S. Ahora otros como Andrew Henderson, se han unido a un club de taxistas, que han dado el salto a un coche 100% eléctrico, que les permite sortear los enormes costes del carburante y el mantenimiento en ese mercado.

Y es que pasar de pasar los casi 1.8 euros el litro que sale el diésel en Noruega, a los casi cero del kWh, supone una diferencia más que notable. Sobre todo teniendo en cuenta que el intenso frío, y la nieve de las carreteras, hace que el consumo se dispare cuando llega el invierno.

Vía | Greencarreports