Los ricos ya no compran Prius. Ahora tienen a Tesla

La llegada del Toyota Prius supuso en su momento un fuerte impacto en la industria de la automoción. Un coche que contaba con un sistema híbrido, y que se convirtió en pocos años en un símbolo de sostenibilidad. El resultado es que se trata de un coche con el que estaba bien que te viesen, lo que animó a muchos ricos y famosos a su adquisición. Leonardo Di Caprio, Orlando Bloom, Cameron diaz..etc etc. Un factor de publicidad gratuita que animó todavía más las ventas del Prius.

Pero el paso del tiempo ha terminado con esta luna de miel. Los ricos y famosos ya no se compran el Prius, principalmente por que ahora tienen algo mucho mejor en todos los sentidos. Tienen a Tesla.

Esto sumado a unos precios de los carburante muy bajos, supone un cóctel que ha derrumbado las ventas del Prius en su principal mercado, Estados Unidos. Sólo en lo que llevamos de año el Prius acumula una bajada de ventas del 26% respecto al pasado año. Una caída que no ha parado ni la llegada de la nueva versión.

Un descenso alto, que podría no parecer catastrófico. Pero esta bajada se suma a unos años de descensos imparables. Una caída que arranca en 2013, cuando las cifras del Prius empezaron su declive, con un recorte hasta agosto respecto al pasado año del 1.58%. En 2014 las cifras se recortaron otro 15.43%, mientras que en 2015 era del 16.33%.

Por desgracia no todos estos clientes se están marchando directamente a comprar un coche eléctrico. Son muchos los que animados por el bajo precio de la gasolina han vuelto a los brazos de los todocaminos y furgonetas de gran tamaño.

Pero hay un nutrido grupo de usuarios, los más influyentes, que han tomado otra dirección. Y es que ahora la moda entre los famosos es comprarse un Tesla. Y esta vez no sólo por cuestión de imagen, también por ser un coche que cumple con los requisitos de prestaciones que estos clientes requieren.

Pero no sólo ricos y famosos se están comprando un Tesla. Las ventas hasta el segundo trimestre han crecido un 43% respecto al pasado año, con una perspectiva de terminar 2016 con un aumento del 57%. Sin duda, una dinámica totalmente diferente, que incluso está limitada por la capacidad de producción. Unas ventas a las que ahora se suman las del Model X, que está creciendo de forma importante y que en Estados Unidos ya ha superado incluso al Nissan LEAF.

¿La respuesta de Toyota? Poner a la venta un Prius más caro, menos potente, no homologable para el taxi en lugares como España, y con un diseño controvertido. Sin duda, una combinación que no parece la más adecuada para volver a la senda del crecimiento.

Un batacazo comercial que se acentuará en los próximos ejercicios con la llegada de los eléctrico de segunda generación. Modelos como el Bolt o el Tesla Model 3 harán que el Prius profundice en su declive en mercados como el norteamericano y Europa, ante la inamovible posición rocosa de Toyota.

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Vía | WSJ