Hace unas semanas los que esperaban como agua de mayo el Sono Sion, se llevaron un fuerte disgusto al conocer que finalmente el precio del modelo con batería en propiedad subía de forma importante. Todo por culpa de un mal cálculo en el coste de las baterías, que provocaba un incremento de 5.500 euros en el precio final.
Pero a pesar de esto parece que la propuesta continúa siendo interesante para un importante grupo de clientes. Así al menos lo ha indicado el director de operaciones de Sono Motors, Thomas Hausch, que en una entrevista a la prensa alemana ha puesto sobre la mesa como está la situación después del anuncio del aumento de precios.
Según el Sr Hausch, en estos momentos el número de reservistas supera los 9.000, y las cancelaciones por el aumento de costes se han visto compensado por las nuevas reservas.
Para el directivo, la causa es que a pesar de incrementar el precio del vehículo de 20.000 a 25.500 euros, la propuesta continúa siendo muy competitiva dentro del mercado. Incluso pensando en las nuevos modelos dentro de su segmento que están cerca de llegar, como el Volkswagen ID.
Elementos como su potente motor, que ahora llega a los 120 kW (163 CV) su cargador bi-direccional, sus paneles solares…esto hace que incluso con un incremento de precio tan notable el conjunto continúe siendo muy atractivo para una buena parte de los interesados.
También ha entrado el directivo en el espinoso tema de la distribución y el mantenimiento. De momento aunque no se ha descartado, Sono Motors no optará por contar con una red de distribución con terceras empresas. Las clásicas concesiones. De esa forma usarán un sistema de código abierto para sus reparaciones, para que cualquier taller pueda realizarlas. Además han diseñado el vehículo para contar con el mínimo mantenimiento posible, y mientras que la reparación no tenga que ver con un elemento de seguridad, se podrán pedir las piezas a la central, que se enviarán a donde el cliente solicite con las instrucciones para su sustitución.
Todo esto hace que Sono Motors mantenga el optimismo, y el respaldo de unos inversores que están completando las nuevas fases de financiación que permitirán recaudar otros 15 millones de euros. Dinero necesario para la finalización del modelo y el ensamblado de las primeras unidades de pre-serie.
En cuanto a la producción del coche, sabemos que el fabricante alemán ElringKlinger será el responsable de suministrar las baterías. Pero de momento no se sabe quién será en encargado de ensamblar el coche. Desde Sono Motors se ha indicado que el acuerdo está cerrado, pero que no pueden confirmar la operación hasta que todos los detalles estén resuelto.
Un interesante detalle que se supone será confirmado a principios del 2019, y que los rumores indican la seleccionada será Magna y su planta de Graz, de donde también sale el Jaguar i-Pace, y que se espera también acoja la producción de un Sono Sion que llegará al mercado a finales del próximo año.
Una producción que el directivo alemán ha indicado llegará a las 260.000 unidades, pero sin concretar en cuantos años. Si tenemos en cuenta que el acuerdo con el suministrador de baterías es por 8 años, podemos pensar que la capacidad será de unas 30.000 unidades al año. Una cifra más que respetable para una pequeña startup.
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