Opinión. ¿Por qué Tesla no sufrirá un aluvión de cancelaciones del Model 3?

Opinión. ¿Por qué Tesla no sufrirá un aluvión de cancelaciones del Model 3?
Prueba Tesla Model 3. Parte 1: exterior e interior

6 min. lectura

Publicado: 14/05/2018 10:51

Todo lo que rodea el lanzamiento del Tesla Model 3 ha estado acompañado por una enorme repercusión. Desde su presentación, donde se anunciaba algo histórico, hasta los interminables retrasos en la escalada de su producción. Algo que ha provocado que muchos medios hayan empezado a indicar que en breve Tesla sufrirá un aluvión de cancelaciones, y con ellos la bancarrota que se anuncia cada año.

Los argumentos de los críticos pueden ser sólidos. A una espera extremadamente larga para hacerse con una unidades, en el mejor de los casos ha sido de casi dos años, y en el peor puede llegar a más de tres o cuatro años desde la primera presentación, hay que sumar el anuncio de nuevas propuestas con amplias autonomías.

Podemos recordar tanto al próximo Hyundai Kona eléctrico, con una versión de 64 kWh y 480 km de autonomía bajo el ciclo WLTP, o su primo el KIA Niro, que montará el mismo sistema. El problema es que no hablamos ni del mismo segmento, ni de nada parecido al modelos americano, además de que so modelos con una capacidad de producción anual equivalente a la de un mes del propio Model 3. Algo que hará casi imposible su compra en una primera fase. También el futuro lanzamiento del Nissan LEAF de 60 kWh, del que todavía no hay noticias casi un año después de la presentación de la actual versión de 40 kWh y que no comenzará su distribución hasta entrado el 2019.

Otros se empeñan en colocar como grandes rivales de Tesla al espectacular Jaguar i-Pace, o el inminente Audi etron. Pero la cuestión es que ninguno de los dos se sitúa en el segmento del modelo que con diferencia más volumen moverá en los próximos años dentro del fabricante americano, el propio Model 3.

La cuestión es que ni unos ni otros son rivales directos para el Model 3. Una berlina de casi 4.7 metros de largo, con espacio para cinco ocupantes y un amplio maletero, que además cuenta con un sistema de propulsión que en su versión menos potente llega a los 262 CV, que dispone de tecnologías como la conducción autopilotada, capaz de seguir evolucionando con las actualizaciones a distancia. Además un modelo que tiene a su disposición una cada vez más amplia red de recarga rápida, tanto la propia mediante los Supercargadores, como la de otros operadores.

Ante este panorama podemos pensar que no hay mucha competencia directa a la vista en el sector de los eléctricos para el Model 3. Algunos podrían pensar que Volkswagen podrá hacer daño, pero recordamos que el programa eléctrico de nueva generación de los alemanes arrancará en 2020 con un compacto. Un ID que se colocará más cerca del LEAF que del Model 3 en cuanto a tamaño y potencia. Luego llegará el ID Crozz, que es un todocamino basado en el anterior, al que seguirá el ID Buzz, un microbús. No hay en el horizonte una berlina compacta por parte de los alemanes capaz de entrar en competencia directa.

Audi se centrará en los todocaminos hasta 2020, y luego lanzarán una berlina de grandes dimensiones que se colocará a la altura de un A8. Mercedes por su parte tampoco tocará el segmento del más económico de Tesla, arrancando en 2019 con el todocamino EQ, y luego con el EQ-A, un compacto similar al Clase A.

Lo más cercano podría ser la propuesta de BMW, que prepara un Serie 3 eléctrico. El BMW i4. Pero este no llegará como muy pronto hasta 2021 o 2022. Y eso son como mínimo tres años por delante para empezar su camino.

Fuera de las grandes marcas alemanas, puede que Infiniti sea la que más se acerque a la propuesta de Tesla. Una marca premium con un nivel de acabados elevado y un nombre muy sólido en todos los mercados. Pero su programa eléctrico no arrancará hasta 2021, y de momento no han confirmado el desarrollo de ninguna propuesta concreta.

El resto de fabricantes, como el grupo PSA y su división DS, Ford, General Motors o Toyota, de momento no tienen en su hoja de ruta lanzar nada similar, con unos programas que el algunos casos todavía no tienen fecha de inicio.

Por lo tanto la conclusión es que en el mercado habrá cada vez más variedad de segmentos, con autonomías más elevadas, pero no hay a la vista ninguna alternativa directa al Tesla Model 3 en su segmento a menos en dos o tres años por delante. Algo que permitirá al fabricante norteamericano mantener sin grandes problemas el grueso de sus reservas, y lograr de esa forma completar el desarrollo de su producción que mucho más lentamente de lo esperado, no deja de incrementar sus cifras cada mes.