Daimler (Mercedes-Benz) anuncia una caída en sus ganancias por los nuevos aranceles en China y la inversión en su programa eléctrico

Las cifras conseguidas en el segundo trimestre por Daimler (Mercedes-Benz) muestran una caída en sus ganancias tras haber comenzado con buen pie durante el primer trimestre. Daimler advierte que las barreras comerciales y las nuevas normativas de emisiones europeas supondrán un peso para la compañía durante los próximos meses, pues probablemente seguirá viendo sus ganancias reducidas.

Este jueves el consejo de supervisión de la empresa ha aprobado de forma definitiva un plan que lleva gestándose desde el año pasado para establecer tres unidades independientes dentro de Daimler, lo que permitirá a las nuevas divisiones de automóviles, camiones y servicios de movilidad reaccionar de forma más rápida a las demandas de los clientes.

«La nueva estructura posiciona a Daimler para abordar el rápido ritmo de cambio en el sector de la movilidad y los desafíos estratégicos correspondientes», declara el presidente Manfred Bischoff en un comunicado.

Uno de los principales problemas a los que se está enfrentando Daimler es la imposición de aranceles en China a vehículos fabricados en Estados Unidos, algo que afecta a la empresa alemana por contar con fábricas en suelo norteamericano. La compañía está explorando nuevas opciones y cambios en la producción de vehículos para administrar los mayores aranceles de importación, lo que podría incluir el ensamblaje en China de automóviles transportados mediante kits, si bien todavía no se ha tomado ninguna decisión al respecto.

A pesar de todo, las negociaciones entre Estados Unidos y la Unión Europea para rebajar los aranceles de los vehículos ha supuesto un empujón para Daimler, que ha visto sus acciones subir ligeramente tras el anuncio.

Las crecientes barreras al comercio en China se unen a la presión que tienen todos los fabricantes para financiar sus programas eléctricos, que en el caso de Daimler, se corresponde con las gamas EQ de Mercedes-Benz y Smart. Así, la empresa alemana está viéndose obligada a llevar a cabo una elevada inversión que está haciendo que las ganancias de la compañía caigan. A esta inversión también tenemos que unir los esfuerzos del fabricante por disminuir las emisiones de sus motores térmicos para cumplir con las nuevas normativas de emisiones europeas.

Tampoco podemos olvidar que Daimler sigue bajo investigación por la posible manipulación de las emisiones de sus motores diésel en Europa: el gobierno de Alemania ha ordenado al fabricante retirar 774.000 vehículos de Europa por el supuesto uso de dispositivos ilegales para falsear las pruebas de emisiones. Esta solución evitará multas a la empresa, si bien conllevará mayores pérdidas.

Fuente | Bloomberg