El nuevo Nissan LEAF logra colocarse como el coche eléctrico más vendido en Europa este año
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Publicado: 18/07/2018 11:34
La nueva versión del Nissan LEAF ha conseguido completar un primer semestre realmente bueno en Europa. El eléctrico japonés se ha situado en la primera posición en el acumulado entre enero y junio, desbancando al hasta ahora líder indiscutible, el Renault ZOE.
En el primer semestre Nissan ha entregado un total de 18.000 unidades del LEAF. Un éxito que se ha basado en la excelente acogida que este modelo ha tenido en mercados como Noruega, Reino Unido, Francia, Holanda y Portugal. Por su parte en España la llegada de esta renovada propuesta también ha disparado las entregas, con 1.200 unidades matriculadas en lo que llevamos de año.
Como curiosidad indicar que la popularidad entre los usuarios del sistema Propilot ha supuesto que en Europa el 72% de los compradores hayan optado por una versión que la incluye. Por su parte este porcentaje en España ha llegado al 79%. Algo que ha facilitado las promociones de Nissan que ha rebajado el precio de la versión que ya incluye de serie este elemento de ayuda a la conducción.
La fuerte demanda del nuevo Nissan LEAF durante los primeros seis meses del año le mantienen de momento como el coche eléctrico más vendido del planeta, con más de 340.000 unidades vendidas en todo el mundo desde que saliera por primera vez a la venta en 2010. Un trono que de momento mantendrán gracias a la buena marcha del nuevo LEAF.
Según Gareth Dunsmore, director de Vehículos Eléctricos de Nissan Europa: «Los coches eléctricos siguen en auge. El nuevo LEAF ha transformado la experiencia de conducir gracias a tecnologías como el e-Pedal, que consiguen demostrar a más clientes las ventajas de la movilidad eléctrica que ofrece Nissan».
Opinión:
La pregunta es hasta cuándo logrará Nissan mantener este renovado liderato. De momento parece que en Europa esto durará unos meses. Y no por méritos propios, sino por deméritos de otras marcas.
No hay dudas de que el nuevo LEAF es un salto adelante en muchos aspectos respecto a la anterior generación. Lo primero es su renovado diseño, que es un cambio radical frente al extraño aspecto del modelo anterior. También ha mejorado algo en su calidad interior, su equipamiento, la potencia de su motor, capacidad de carga, e incluso han añadido la imprescindible toma de tipo 2 para recargas monofásicas.
Pero Nissan ha cometido dos pecados que no le han pasado factura de momento precisamente por culpa de la falta de competencia. El más notorio es la inclusión de una batería de una capacidad mejorable. Recordamos que Nissan es de las pocas marcas que dan las cifras de capacidad brutas, y no la capacidad útil. En este caso 40 kWh que se quedan en apenas 36 kWh útiles. Un problema en una era en la que los 45, los 50 o los 60 kWh son cada vez más habituales.
Sin duda el mayor error ha sido la ausencia de un sistema de refrigeración en la batería. Algo que supondrá una vida útil más corta para las celdas, y una menor autonomía cuando las condiciones climatológicas no sean las idóneas. Y si en un coche eléctrico la batería tendrá poca vida útil, y poca autonomía, sin duda hablamos de una muy mala combinación. Un combo que se completa con los graves problemas para recargar en tomas rápidas cuando la batería alcanza una determinada temperatura.
Esto tiene como consecuencia que la competencia no tiene el listón demasiado elevado para dejar atrás a una Nissan que parece que se ha dormido en lo alto de las listas de ventas, y que corre el riesgo de caerse para un lado en el podium para no recuperarse.
Fuente | Nissan