¿Por qué Volkswagen afirma que el ID.3 será igual de importante que el Beetle y el Golf?

¿Por qué Volkswagen afirma que el ID.3 será igual de importante que el Beetle y el Golf?

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Publicado: 13/09/2019 12:42

Durante el recién inaugurado Salón del Automóvil de Frankfurt 2019, el coche que más ha captado la atención de los medios ha sido el Volkswagen ID.3. Este modelo es un compacto del segmento C llamado a sustituir al e-Golf, siendo el primer paso de los ambiciosos planes de electrificación de la compañía. Así, la marca alemana confía en convertirlo en un auténtico superventas en el mercado europeo.

La decisión de bautizar como ID.3 al primer modelo de la nueva gama de coches eléctricos ID. de Volkswagen es muy sencilla: por un lado, está encuadrado en la tercera categoría del mercado, el anteriormente mencionado segmento C; por otro, la firma alemana cree que este modelo será el tercer vehículo clave en su historia tras el Beetle y el Golf.

El Volkswagen Beetle fue desarrollado por Ferdinand Porsche con el objetivo de crear un vehículo que permitiera motorizar a la sociedad alemana. El primer modelo de la marca estuvo en producción desde 1938 hasta 2003, siendo el coche más vendido de la historia con 21,5 millones de unidades. A pesar de que Volkswagen ha discontinuado recientemente la producción de su versión neo-retro (el New Beetle/Beetle XXI), lo sigue considerando uno de sus emblemas.

El Volkswagen Golf por su parte llegó a principios de los años 70, definiendo con su desembarco el segmento de los compactos europeos modernos. Este modelo fue el encargado de salvar a la marca alemana de la larga crisis que arrastraba desde los años 60, pues la firma se había visto incapaz de sustituir al anticuado Beetle por un modelo de éxito (los Type 3 y Type 4 fueron un sonado fracaso).

El Volkswagen ID.3 por su parte tendrá la difícil tarea de popularizar el coche eléctrico en el mercado europeo. Para ello, cuenta con la plataforma modular eléctrica MEB, que permite aprovechar al máximo la configuración eléctrica del vehículo: con el motor situado en el eje trasero y las baterías planas en los bajos, el modelo ofrece un espacio interior similar al de un Passat de 4,78 metros de largo en una carrocería de idénticas dimensiones a la de un Golf, de 4,26 metros.

Por otro lado, el automóvil se ofrecerá a un precio relativamente asequible (menos de 30.000 euros antes de ayudas), así como con tres packs de baterías (45 kWh y 330 km de autonomía WLTP, 58 kWh y 420 km WLTP, y 77 kWh y 550 km WLTP).

Sin embargo, algunos asistentes al Salón del Automóvil de Frankfurt han criticado que el modelo cuenta con un interior de plásticos duros de aspecto más pobre que el de su equivalente térmico Golf, algo debido al empeño de la marca en reducir los costes del vehículo al máximo.

¿Conseguirá la compañía catapultar el ID.3 al éxito? ¿Vosotros qué pensáis?

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