El experto en análisis de manufactura Sandy Munro continúa con su esperado despiece del Tesla Model Y, un modelo que de acuerdo con su propio constructor está llamado a superar las ventas combinadas de los Model S, Model X y Model 3. Tras haber analizado aspectos como el monocasco, el cableado, los frenos o los ajustes de la carrocería, ahora Munro ha realizado un vídeo explicando algunas de las características del salpicadero del todocamino.
El Model Y emplea exactamente el mismo panel que el Model 3, el cual fue duramente criticado por algunos internautas en el momento de su presentación hace ya tres años debido a lo espartano de su diseño: carece de instrumentación tras el volante o en su defecto de un Head-up Display, está formado por superficies planas, y todos los controles se aglutinan en una pantalla táctil de 15 pulgadas flotante y en formato horizontal.
Si bien algunos han defendido a lo largo de estos años el «minimalismo» de este interior, lo cierto es que en líneas generales el salpicadero del Model 3 es extremadamente simple en comparación con el de sus rivales premium del segmento D. Pero, más allá de los subjetivos gustos estéticos, ¿qué objetivo tiene el ofrecer un interior así?
Munro ha confirmado en su último vídeo lo que muchos ya sabían: este espartano salpicadero se debe a un ahorro de costes puro y duro. Controlar todas las funciones desde la pantalla central y crea un salpicadero simple y con pocas piezas (hasta el punto de renunciar a la instrumentación tras el volante) permite a Tesla ahorrar una cantidad significativa de dinero respecto a otros interiores más elaborados.
Además, Munro ha señalado que la ausencia de rejillas para el sistema de climatización (la orientación del flujo del aire en los Model 3 y Model Y se controla desde la pantalla central, cuando en la inmensa mayoría de vehículos del mercado las toberas están a la vista y se regulan de forma manual) también permiten ahorrar dinero durante el proceso de fabricación.
Como curiosidad, el experto también menciona que la estructura del salpicadero en realidad es una viga transversal que no solo hace que sea más sencilla la instalación del panel, sino que aumenta la rigidez del monocasco y mejora la seguridad del vehículo en caso de choque lateral. Por otro lado, también permite ahorrar peso y hace más sencillo el diseño general.