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Así era la estética del Mach-E antes de que Ford decidiera transformarlo en un Mustang

El Ford Mustang Mach-E ha supuesto todo un hito dentro de la historia de Ford, no solo por ser su primer coche eléctrico verdaderamente orientado al mercado de masas, sino también por convertirse en el primer integrante de la gama Mustang con una carrocería de tipo SUV. Sin embargo, inicialmente no estaba previsto que tuviera los rasgos del mítico pony car.

Bautizado originalmente como Ford Mach-E, el prototipo primigenio era un modelo de estética suave y anodina. Sin embargo, directivos como Jim Farley, presidente de mercados globales de Ford, se dieron cuenta de que su diseño no era el adecuado. «Cuando lo vi por primera vez… dije, ‘Oh, chico. Houston, tenemos problema’. El vehículo parecía un proyecto científico«.

No fue tarea sencilla convencer a Bill Ford, presidente ejecutivo de la firma, de transformar el Mach-E en un Mustang. El bisnieto de Henry Ford es un fanático del clásico deportivo y, al igual que numerosos entusiastas de todo el mundo, inicialmente no vio con buenos ojos el empleo de esta denominación en un SUV eléctrico.

Finalmente la necesidad de ofrecer un producto atractivo se impuso, y el Mach-E se transformó en el Mustang Mach-E. Su estética se modificó profundamente: se elevó y alargó el capó, se retrasó el parabrisas, se amplió la distancia entre ejes, se incrementó el diámetro de las ruedas, se musculó la carrocería, se simuló una línea fastback combinando los arcos laterales en el color de la carrocería con el techo en negro, y se añadieron diversos elementos inspirados en el icónico deportivo (ópticas, falsa parrilla, etc).

En el apartado mecánico también se llevaron a cabo algunos cambios, haciéndose un mayor hincapié tanto en las prestaciones como en la autonomía, pues el objetivo era competir contra los modelos más punteros del segmento. Gracias a todas estas modificaciones, el Ford Mustang Mach-E podrá plantar cara al Tesla Model Y, entre otros.

Ford no descarta añadir en el futuro más modelos eléctricos a la gama Mustang, si bien tiene claro que no serán SUV. Así, los rumores apuntan al lanzamiento de un sedán eléctrico llamado a competir contra el Tesla Model 3. Este vehículo, que podría recibir la denominación comercial Mustang Boss-E, conviviría tanto con el Mustang Mach-E como con los Mustang Coupé y Cabrio térmicos.

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