In extremis la Comisión Europea y el Reino Unido han llegado este jueves a un acuerdo tras días de intensas negociaciones. En el tiempo de descuento se han sentado las bases entre ambos socios para que a partir del próximo 1 de enero de 2021, cuando Reino Unido salga definitivamente de la Unión Europea no se produzca el temido «Brexit duro«.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha declarado que «Tenemos un trato justo y equilibrado» a pesar de que el proceso de negociación «ha sido un camino largo y tortuoso«.
Por su parte Boris Johnson celebra el acuerdo eufórico anunciando a sus conciudadanos: “Tal y como prometimos, recuperamos el control de nuestras leyes, nuestro dinero, nuestras aguas”. Cerrar el pacto acordado no termina con la incertidumbre.
La pelota está ahora en el tejado británico que tienen que ser ratificado por Westminster, lo que siempre ha supuesto un verdadero problema para el inquilino de turno de Downing Street.
Qué significa esto para la industria del automóvil
Un Brexit duro hubiera supuesto poner en riesgo la producción de casi 3 millones de automóviles y vehículos comerciales entre la Unión Europea y el Reino Unido. El acuerdo evita a catástrofe de todo el sector del automóvil que bastante tiene con la adaptación y la transición a los vehículos eléctricos, como para sufrir un revés de tal magnitud.
Desde la Asociación Europea de Constructores de Automóviles (ACECA) pueden respirar con tranquilidad tras el acuerdo alcanzado tras «evitar el efecto catastrófico de un Brexit sin acuerdo«.
La industria del automóvil es esencial para el PIB de toda la Unión Europea, además como apuntan desde la asociación, no existe ninguna industria más integrada que la del automóvil en Europa, «con complejas cadenas de proveedores comunes para toda la región«, como apunta el director general Eric Mark Huitema.
El comercio del automóvil entre Reino Unido y la UE asciende a 3 millones de automóviles que representan 54 mill millones de euros y otros €14 mil millones sólo en componentes.
De haberse producido un Brexit sin acuerdo «hubiera sido simplemente devastador para la industria del automóvil» recalcaba Huitema.
La industria acaba de superar una bola de partido, aunque aún quedan los flecos del acuerdo, la aprobación por el parlamento británico y evaluar en detenidamente todos los detalles del acuerdo y su impacto en las relaciones comerciales y, en especial, del sector del automóvil.