Unplugged Performance arregla a tiempo su Tesla Model 3 y logra el segundo puesto en Pikes Peak

Hace unos días, nos hicimos eco de la triste noticia de que el Tesla Model 3 de Unplugged Performance, que iba a participar este domingo en la mítica carrera estadounidense Pikes Peak Hill Climb, había sufrido un aparatoso accidente que comprometió gravemente su integridad. Sin embargo, en apenas 48 horas el equipo de Unplugged Performance fue capaz de arreglar el coche para el evento.

El Model 3 de Unplugged Performance compitió con el piloto Randy Pobst a los mandos. Además, no fue el único Model 3 en la parrilla, pues el dos veces campeón de Pikes Peak Blake Fuller también acudió de forma independiente con su propia unidad preparada. Los Tesla quedaron finalmente en primer (Fuller) y segundo puesto (Pobst) en la Exhibition Division.

El tiempo del Model 3 Performance de Fuller fue de 11:02,802, mientras que la unidad de Pobst y Unplugged Performance se quedó en 11:04,131. El tercer lugar lo ocupó la Ford F1 de Scott Birdsall, una pick-up de 1949 con una preparación extrema que logró un meritorio tiempo de 11:24,065, si bien quedó a mucha distancia de los modelos eléctricos.

La victoria de Fuller fue posible gracias a la colaboración de la comunidad Tesla: debido a la pandemia, la financiación era muy escasa, pero una pareja donó su Model 3 Performance para la carrera, mientras que el resto de gastos fueron cubiertos por unas 150 personas y empresas privadas que decidieron aportar su granito de arena para que Fuller pudiera participar con el sedán eléctrico.

La unidad de Unplugged Performance lo tenía todo para ganar: Pobst realizó el primer tramo siete segundos más rápido que Fuller; sin embargo, el vehículo experimentó una serie de problemas de calentamiento en la batería que hicieron que el resto de la subida lo realizara a mitad de potencia. A pesar de ello, solo fue 2 segundos más lento que Fuller en el cómputo global.

De acuerdo con Pobst, el Model 3 «Ascension R» de Unplugged Performance todavía puede dar mucho más de sí. «Nunca había conducido un coche tan bueno en Pikes Peak», afirma el piloto, que el año pasado acudió a la carrera con un Dodge Charger SRT Hellcat 2019 con el que quedó segundo en la Exhibition Division con un tiempo 11:57,874; es decir, más de 50 segundos más lento que el Tesla.

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