La EPA (Agencia Ambiental de los Estados Unidos) ha presentado sus nuevas propuestas con el objetivo de reducir las emisiones y el consumo de millones de automóviles. En caso de salir adelante estas nuevas propuestas se producirá un cambio significativo respecto a la posición de esta agencia mantenida durante la anterior administración.
El nuevo marco regulatorio pretende establecer que el consumo de combustible se reduzca en un 10% en los modelos que se vendan a partir del año 2023. De esta forma se alcanzará una media de 52 millas por galón de combustible (aproximadamente 5.4 litros a los 100 km) para el año 2026.
Además la EPA está promoviendo un aumento en la eficiencia que se sitúa alrededor del 5% para cada año, para los modelos de automóviles de combustión interna que se comercialicen a partir de 2024 y 2026.
Pese a estas nuevas propuestas, de momento, la agencia no parece querer cambiar los estándares establecidos por la administración Trump para 2021 y 2022. Según La Casa Blanca la imposición de nuevos límites supone un paso adelante respecto de los estrictos objetivos que se propusieron 2012 durante la era Obama.
Impacto económico
Desde la EPA se han hecho públicos una serie de estimaciones que indican el impacto económico de estas nuevas propuestas. El coste total de la nueva normativa que inicia su debate costará entre 150 y 240 mil millones de dólares (127-220 mil millones de euros) durante un periodo que llegaría a 2025.
De cumplirse estos objetivos los automovilistas estadounidenses podrán ahorrar entre 120.000 y 250.000 millones (102-212 mil millones de euros), todo esto gracias a la reducción del consumo de sus automóviles ICE propuesta por la EPA.
Junto a este ahorro para la ciudadanía se suman importantes beneficios económicos estimados entre 86 y 140 mil millones de dólares (73-121 mil millones de euros), por la reducción de la contaminación y el menor uso del sistema sanitario que esto conlleva.
Con esta nueva propuesta de la agencia se puede reducir el consumo de gasolina en más de 290 millones de barriles para 2050.
Pero no sólo existirá un beneficio económico. Los coches que cumplan con la nueva normativa verán extendida su autonomía en un total, según las estimaciones de la EPA, de 450 mil millones de millas.
Sin olvidar al coche eléctrico
Pero la EPA no sólo piensa el los coches de combustión interna. Para incentivar e impulsar la transición hacia la movilidad cero emisiones 100% eléctrica, a pesar de que sólo se espera una cuota de mercado del 8% para los vehículos eléctricos e híbridos enchufables para 2026.
La agencia trabaja activamente para empujar a los fabricantes tradicionales hacia la producción de automóviles con bajas emisiones y, a ser posible, cero emisiones.
Desde la EPA se ha propuesto restaurar los créditos ambientales vinculados al avance tecnológico de los vehículos y a incrementar los créditos vinculados a dispositivos que, actualmente, no están reconocidos en las pruebas de homologación de la agencia ambiental.
Un ejemplo de eso es la el uso de faros de alta eficiencia y pinturas especiales para mantener estable el clima interno de los vehículos.