Personas, motos, patinetes y hasta vehículos en dirección contraria. Nada impide a este coche autónomo sin conductor llegar a su destino

A pesar que desde Japón, el presidente de Toyota considera que la conducción autónoma no está aún lista según las declaraciones realizadas por Akio Toyoda, desde China parecen pensar de otra forma tras ver los últimos resultados de la demostración realizada por la startup AutoX.

En diferentes ocasiones este medio ha relatado las dificultades que la conducción en zonas urbanas densamente pobladas y donde existen gran número de usuarios de la vía pública, como cuando el Autopilot fue derrotado por la realidad de las calles de Ho Chi Minh, en Vietnam.

Ahora un nuevo vídeo demuestra los avances de la startup china en materia de conducción autónoma. Al contrario que la flota de Jaguar I-Pace que Waymo ha desplegado en San Francisco, el robotaxi protagonista de la filmanción carece de conductor o supervisor a bordo, pese a que las calles por donde circula son mucho más conflictivas y difíciles para un sistema autónomo que la popular ciudad californiana.

La grabación se ha realizado en lo que se considera un ‘pueblo’ en China, que fácilmente puede ser equivalente a una ciudad media española. En esta localidad las normas de tráfico no se interpretan de la misma forma que en Berlín o Viena, esto pone contra las cuerdas a cualquier sistema que pretenda prescindir del conductor humano.

En el vídeo publicado en YouTube, se aprecia la forma de conducir y usar la vía pública de la localidad en la que confluyen todo tipo de vehículos, bicicletas, motos, patinetes y peatones que no siempre respetan el sentido de circulación o los carriles asignados.

Con el objetivo de reproducir unas condiciones circulatorias que podrían sacar de quicio a un conductor tradicional, AutoX ha puesto a la prueba a su sistema de conducción autónomo en las peores circunstancias posibles.

La tecnología desarrollada por la startup china parece desenvolverse bien en ciertas situaciones que se podrían denominar como críticas, a lo largo de su periplo por la ciudad. A pesar de contar con sistemas de Nivel 4 de conducción autónoma, la tecnología del vehículo le permite conducir sin la presencia de persona alguna en su interior, incluso en circunstancias en las que otros vehículos circulan en dirección contraria.

El prototipo de AutoX logró llegar a su destino sin necesidad de intervención humana. Este aspecto es especialmente destacable si se compara con los sistemas en desarrollo por parte de Uber, Argo AI o la propia Waymo. Estos sistemas operan en entornos limitados, digitalizados previamente y muy controlados, mientras que en el vídeo se aprecian situaciones límite lejanas a las simulaciones tradicionales.

Democratizar la conducción autónoma

AutoX declara tener como objetivo «democratizar la conducción autónoma«. Con este fin ha desarrollado un sistema de asistencia a la conducción capaz de manejar escenarios extremadamente complejos y operar incluso a altas velocidades.

La tecnología definida como Gen5 AD incluye 28 cámaras que capturan 220 millones de píxeles por segundo, alrededor del vehículo se despliegan 6 sistemas lidar de alta resolución (desde 15 millones de puntos por segundo), un radar 4D (con una resolución de 0,9°) y 50 sensores diferentes, para que nada se le escape al sistema.

La gestión de tal cantidad de datos provenientes de multitud de sensores y sistemas diferentes, es procesada por un ordenador de a bordo con una potencia de cálculo de 2.200 Tops. Este computador es el encargado de controlar cada movimiento y decisión del automóvil, gracias a un software de inteligencia artificial desarrollado por AutoX.

La startup china, está probando su tecnología en Shenzhen, Shanghai y Wuhan, pero también se ha ido al corazón de la innovación estadounidense, llevando alguna de sus unidades a la propia Silicon Valley, donde posee una licencia de circulación de sus robotaxis en San José.

AutoX cuenta entre sus socios a marcas conocidas como Dongfeng y el gigante Alibaba. A estas se ha unido el grupo automotriz occidental Stellantis. Quizás en un futuro próximo los Fiat Panda eléctricos puedan moverse por las ciudades de toda Europa con la tecnología de conducción autónoma de esta prometedora startup china.

Fuente | AutoX