La guerra de precios entre los fabricantes de coches eléctricos en China no tiene visos de terminar pronto. Apenas dos días después de que 16 grupos firmaran una carta en la que se comprometían a evitar «tarifas anormales», la Asociación China de Fabricantes de Automóviles se ha visto obligada a retractarse debido a que entra en conflicto con la legislación vigente.
Según ha admitido la propia organización, que fue la que impulsó este acuerdo, el compromiso alcanzado la semana pasada viola la ley antimonopolio de China. Por este motivo, la Asociación instará a las marcas a que compitan de manera justa con precios independientes. Esto significa que, en la práctica, la tregua ha terminado.
Entre los firmantes se encontraban Dongfeng, FAW, SAIC, BAIC, Changan, GAC, Chery, JAC, Geely, Sinotruk, Great Wall, BYD, NIO, Li Auto, Xpeng y Tesla, que a pesar de no ser una compañía china, sí que es uno de los principales productores de coches eléctricos de la región, además de la responsable de haber iniciado la guerra de precios a principios de año.
El objetivo con este acuerdo era establecer un marco justo para los jugadores más jóvenes y/o pequeños, que no cuentan con la capacidad económica para resistir la guerra de precios, ya que se ven obligados a sacrificar volumen o rentabilidad para mantenerse a la altura de los líderes del sector. Y es que competidores como Tesla, que disfrutan de un margen de beneficio mucho más abultado, juegan con ventaja a la hora de «tirar» sus tarifas.
El acuerdo alcanzado va en contra de la ley antimonopolio china
Este malogrado pacto de caballeros constaba de cuatro puntos principales. «Primero, cumpliremos con las reglas y regulaciones de la industria, regularemos las actividades de marketing, mantendremos una competencia justa y no interrumpiremos el orden del mercado con precios anormales. En segundo lugar, prestaremos atención a los métodos de marketing, no exageraremos ni realizaremos marketing falso, y no engañaremos a los consumidores para atraer su atención y aumentar la captación de clientes.
En tercer lugar, daremos prioridad a la calidad y utilizaremos productos y servicios orientados a la calidad y de alta calidad para satisfacer las necesidades de las personas. En cuarto lugar, cumpliremos activamente con nuestra responsabilidad social y asumiremos un papel activo para ayudar a estabilizar el crecimiento económico, aumentar la confianza y prevenir riesgos, y trabajaremos juntos para contribuir al crecimiento económico nacional».
Fuente | Reuters
