Hace unos días hemos hablado de los problemas internos entre Volkswagen y su marca Audi por el retraso en el desarrollo de la nueva plataforma SSP. Una arquitectura que debería acoger sus próximos coches eléctricos del grupo. Algo que ha llevado a la marca de los aros a buscarse la vida fuera de casa, y que los rumores indican lo hará con un acuerdo con un fabricante chino.
Ahora, las redes sociales y los medios del gigante asiático están informando de que Audi estaría en conversaciones con IM Motors, una marca premium propiedad del gigante chino SAIC. Grupo donde encontramos entre otras a la marca MG.
Lo que busca Audi, es dar una respuesta a la cada vez más feroz competencia de los coches eléctricos en mercados como China, donde Audi busca socios para el desarrollo de plataformas eléctricas con unos tiempos de diseño y producción más cortos de los que tienen que vivir en Europa.
Uno de los modelos en los que podría basarse Audi es el IM Motors L7. Una berlina eléctrica desarrollada entre SAIC y el gigante tecnológico Alibaba, que se coloca precisamente en el segmento premium.
Esta cuenta con lo que podríamos pensar que encaja dentro de la oferta de Audi, con un sistema de propulsión de 400 kW (536 CV) con un par máximo de 700 Nm, suficiente para llegar a los 100 km/h en unos 4 segundos. En el aspecto de las baterías, el L7 cuenta con una versión de acceso de 93 kWh, con 615 km de autonomía CLTC, y una de mayor alcance con 118 kWh y que llega a los 780 km CLTC.
A nivel tecnológico, el L7 equipará 15 cámaras de alta definición, radares de ondas de 5 milímetros y 12 radares ultrasónicos, aunque actualmente se desconoce el grado de automatización con el que desembarcará en el mercado.
De confirmarse, sería la primera vez que Audi adquiere una plataforma externa al grupo Volkswagen, en un movimiento bastante sorprendente y que se enmarca en una situación delicada para las marcas europeas, que están siendo superadas por los grupos chinos y Tesla en el principal mercado automovilístico mundial, China, pero que también empiezan a notar sus efectos en los mercados locales, como Alemania.
En el caso de China, las ventas de coches eléctricos de Audi llegaron apenas a las 3.000 unidades en el primer trimestre, mientras que BMW vendió 21.646 unidades y Tesla llegó a las 137.429 matriculaciones. Señales altas y claras de que hay que hacer cambios, y rápidos.
Vía | Autonews
