Según informa ANFAC (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones), el año pasado se instalaron 11.173 nuevos puntos de carga para vehículos eléctricos en nuestro país, alcanzando un total de 29.301. A pesar de esta notable incremento, España sigue a la cola de la Unión Europea en el despliegue de infraestructura de recarga.
El indicador global de electromovilidad del Barómetro de Electromovilidad 2023 de ANFAC, que valora la penetración del coche eléctrico y la instalación de estaciones de carga públicas, llegó a los 14.1 puntos en 2023, un aumento de 3.7 puntos respecto al año anterior. Sin embargo, la media europea se sitúa en 27.4 puntos, prácticamente doblando los registros nacionales.
En 2023 se vendieron 124.628 vehículos electrificados en España (+47%), logrando una cuota de mercado del 11%. El indicador de penetración del vehículo eléctrico se sitúa en 21.4 puntos (+4.6 puntos), muy por detrás de la media europea (40.4 puntos), y sólo por delante de Italia (19.5 puntos), Hungría (17.8 puntos) y República Checa (14.7 puntos). No podemos dejar de mencionar la caída de 7.2 puntos experimentada por Alemania tras el fin de las ayudas a los híbridos enchufables, que a finales de año se extendió a los eléctricos a baterías.
En cuanto al indicador de infraestructura de recarga, España consigue una valoración de 6.7 puntos, un crecimiento de 2.8 puntos a todas luces insuficiente para seguirle el ritmo al resto de Europa (14.4 puntos). Por comparar, los dos países que lideran el ranking (Países Bajos y Noruega) quintuplican y cuadriplican la media europea con 71.1 y 60.4 puntos respectivamente.
Una red de estaciones ultra-rápidas insuficiente
ANFAC hace hincapié en que es necesario fomentar la instalación de estaciones ultra-rápidas (es decir, con potencias de al menos 150 kW) para reducir los tiempos de carga. En 2023 se construyeron un total de 827 puntos de este tipo.
«El sector está comprometido con una movilidad sostenible donde el vehículo electrificado sea el principal vector de este nuevo ecosistema. Los datos de recarga este año son positivos, y los ciudadanos deben saber que es posible circular sin problemas con un vehículo eléctrico por el territorio. Sin embargo, no estamos yendo al ritmo que deberíamos», explica José López-Tafall, director general de ANFAC.
«Nos hemos quedado muy lejos de esos 45.000 puntos de recarga marcados para lograr los objetivos del PNIEC para 2030 y este año la exigencia aumenta hasta los 64.000, dos veces la red actual. El despliegue de puntos de recarga interurbanos lleva más tiempo que el deseado y, si no aceleramos y resolvemos la falta de coordinación y gobernanza, el binomio mercado-infraestructura se desacopla. Por eso hay que acelerar y fijar objetivos vinculantes no a 2030, sino ya para 2024, 2025 y así año tras año. La Ley de movilidad Sostenible debería ser la herramienta para conseguir esa gobernanza».
Fuente | ANFAC
