Los coches eléctricos siguen siendo más caros que los de combustión
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Publicado: 23/08/2024 12:59
El precio es una de las principales barreras para la expansión masiva del coche eléctrico en Europa. La diferencia con los modelos de combustión es elevada. La cuestión es saber cuánto. Algo que nos ha permitido conocer un estudio que ha cuantificado las diferencias entre los coches eléctricos y los de combustión de similares características.
El estudio es obra del experto alemán del sector automovilístico, Ferdinand Dudenhöffer, que ha llegado a la conclusión de que los compradores de coches eléctricos pagan una media de un 21% más por un modelo eléctrico que por un vehículo de combustión comparable.
Dado que los precios son más altos, y los descuentos respecto a los modelos de combustión son menores, y las ayudas se han retirado, es fácil explicarse por qué ha caído la cuota de ventas de eléctricos en Alemania de forma más intensa que en otros mercados.
Dudenhöffer comparó los precios de venta menos los descuentos de 20 de los modelos más importantes del mercado con sus equivalentes con motor de combustión. Los descuentos se determinaron según los que hay activos este mes de agosto y se han comprobado mediante los datos de los intermediarios por internet.
El precio de venta antes de promociones de los coches eléctricos es de media de 45.040 euros, el descuento es del 12,9% y el precio de venta con este incentivo de la marca es de 39.236 euros.
Por su parte, los modelos con motor de combustión tienen un precio medio de 38.228 euros, el descuento es del 15,0%, lo que les proporciona un precio de venta de 32.355 euros.
El informe llama la atención sobre las importantes diferencias comerciales de las marcas, con una BMW que apenas hace diferencia a la hora de aplicar descuentos entre sus diferentes tecnologías: «En este momento, a falta de impulso desde el sector público, son los fabricantes premium alemanes los que parecen impulsar el coche eléctrico en Alemania. Los fabricantes premium subvencionarían los coches eléctricos con los beneficios de la venta de motores de combustión; no había otra explicación para las pequeñas diferencias de precios, dados los costes de producción significativamente mayores.»
El experto avisa de que para avanzar en la implantación del coche eléctrico, a veces se sufren pérdidas. Porque sin modelos eléctricos de buenas ventas, los fabricantes alemanes perderán su competitividad a nivel internacional.
“Parece un anacronismo en tiempos de cambio climático. Los políticos rezan para que los motores de combustión sean saludables y los fabricantes de coches intentan liderar a Alemania como lugar de producción de automóviles en el futuro con grandes inversiones y, a veces, pérdidas«.
En el otro lado de la balanza encontramos a las marcas de volumen y precio más terrenales. En Opel y Peugeot, según el análisis, los coches eléctricos son mucho más caros que los modelos con motor de combustión equivalentes.
En agosto, la versión eléctrica del Opel Corsa costaba 13.633 euros, un 79% más, que la versión gasolina. En el caso del Opel Mokka, la diferencia es de 9.411 euros, un 35% más que el modelo de combustión. La comparación de precios es similar para Peugeot, Nissan y los fabricantes chinos.
Según Dudenhöffer, la versión eléctrica del MG ZS cuesta 12.843 euros más que la gasolina, es decir, un 75% más que la alternativa con motor de combustión.
Los coches eléctricos son demasiado caros para el consumidor medio
Con tales diferencias de precios, los expertos ponen sobre la mesa una realidad: “Los coches eléctricos son demasiado caros para el consumidor medio”.
Esto se traslada también a las ventas, que no logran despegar en los segmentos donde las diferencias son mayores. En Alemania, los coches eléctricos de Opel y Peugeot sólo lograron una cuota de ventas del 5,1% dentro de sus marcas entre enero y julio de este año.
En total, la cuota de mercado de los coches eléctricos en Alemania entre enero y julio fue del 12,2%. BMW incluso alcanzó el 16,7%, algo que tiene que ver con la menor diferencia de precio entre sus tecnologías frente al de otros grupos.
Por ejemplo, el BMW X1, es «sólo» 2.260 euros, el 6%, más caro que su versión gasolina. Lo mismo se aplica a los modelos de Mercedes.
El hecho de que las grandes diferencias de precios sean quizás la razón más importante de la lenta venta de coches eléctricos lo demuestra también el impacto que ha tenido el final de las ayudas públicas en Alemania, que a pesar de la falta de una red de carga más amplia, aumentaban sus cifras de forma considerable. Pero en cuanto se retiraron las ayudas, se hundió el mercado de forma inmediata.
Datos que ponen sobre la mesa la importancia del lanzamiento de los modelos que se moverán en el arco de los 20.000 euros, que sin duda ayudarán al coche eléctrico a salir del círculo vicioso de unas ayudas que o no son efectivas, o directamente distorsionan el mercado creando inestabilidad que asusta a los clientes.
Fuente | Automobilwoche