Volkswagen lo tiene claro: la electrificación del mercado no tiene vuelta atrás

Thomas Schäfer, CEO de la marca Volkswagen, considera que ya no hay marcha atrás en el proceso de electrificación de la industria del automóvil. Por este motivo, el ejecutivo está trabajando con su equipo para agilizar el desarrollo de sus próximos modelos y reducir costes. «Tenemos que ser más rápidos, necesitamos ciclos de vida de producto más cortos y tenemos que comercializar vehículos más baratos».

Esta estrategia es la misma que ya han implementado otros grupos como Renault, cuyo próximo Twingo se desarrollará en dos años, frente a los cuatro usuales. Además, la firma del rombo aspira a abaratar en un 40% su próxima generación de compactos eléctricos (Mégane y Scénic), que verán la luz entre 2027 y 2028 tras un ciclo de vida de apenas 5 y 4 años respectivamente.

«La competencia nos mostrará qué precios podemos alcanzar». Schäfer también ha confirmado que el próximo Golf será exclusivamente eléctrico, estando llamado a reemplazar al actual ID.3. «[Ambos] convergerán, ya no serán paralelos». En un principio, la novena generación del icónico hatchback se asentará sobre la plataforma modular SSP.

Respecto a esta arquitectura, señala que «tenemos que tener cuidado y necesitamos objetivos de costes sostenibles». Esta base se utilizará en prácticamente todos los futuros coches eléctricos de la compañía, desde modelos pequeños hasta vehículos de altas prestaciones. Para lograr que los módulos de la plataforma sean baratos y competitivos, se están llevando a cabo numerosas negociaciones con los proveedores.

Volkswagen podría colaborar con Renault en el desarrollo de un coche eléctrico de 20.000 euros

El directivo afirma que tanto China como Estados Unidos se están alejando gradualmente del motor de combustión interna, un camino que también debe seguir Europa. Para cumplir con sus objetivos de emisiones de dióxido de carbono en 2025, Volkswagen necesitará el doble de eléctricos que en la actualidad; de lo contrario, se enfrentará a cuantiosas multas.

Schäfer también ha revelado que, aunque son rentables, sus coches eléctricos apenas dan beneficios, algo que considera inaceptable a largo plazo. Hasta que los costes se reduzcan y Volkswagen aumente los ingresos por unidad vendida, su gama térmica e híbrida seguirá siendo la que salve los muebles.

Uno de los grandes hitos de su programa de electrificación será el «proyecto Ámsterdam», un urbano eléctrico con un precio objetivo inferior a los 20.000 euros antes de ayudas. Los rumores apuntan a que podría tratarse de un desarrollo conjunto con Renault, que aportaría la plataforma AmpR Small del próximo Twingo para compartir inversiones.

Fuente | ecomento