El error de cálculo que enterrará las posibilidades de éxito del Cupra Tavascan
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Publicado: 06/06/2024 09:10
Hace unas semanas se presentaba el Cupra Tavascan. El segundo coche eléctrico de la marca del grupo Volkswagen que llegaba con la intención de ofrecer una propuesta más agresiva en cuanto a diseño y calidades, pero que se ha topado con unos cambios legislativos que pueden arruinar totalmente sus posibilidades en Europa.
Como recordamos, el Tavascan es un crossover deportivo de 4.64 metros de largo hermano de los Audi Q4 Sportback e-tron, Skoda Enyaq Coupé y Volkswagen ID.5. Al contrario que ellos, este no será fabricado en Europa sino que llegará desde la planta de Volkswagen en Anhui, China.
Contará con dos versiones, Endurance y VZ. La primera contará con tracción trasera y 210 kW (286 CV) de potencia, mientras que el VZ llega a los 250 kW (340 CV). La batería en ambos casos será un pack de 77 kWh que le otorgarán una autonomía homologada de 568 km WLTP.
Una gama de la que de momento solo conocemos el precio de la más económica, la Endurance, que en España arrancará en los 52.010 euros.
Un coste que se coloca en la parte alta de su segmento para una CUPRA que quiere posicionarse como una denominación a caballo entre el sector generalista y el premium, con una propuesta más cara que los Tesla Model Y Long Range RWD, con 600 km WLTP y un precio de 46.990 euros, el Peugeot E-3008, con 415 km WLTP y unas tarifas desde 46.660 euros, o el Volkswagen ID.5, con sus 556 km WLTP y unos precios que en España arrancan en los 51.515 euros.
Error de cálculo de Volkswagen con el Cupra Tavascan
El principal problema del Tavascan es precisamente su fabricación en China. Esto supone varios inconvenientes, empezando por que esto le expulsará de los programas de ayudas a la compra de coches eléctricos en mercados tan importantes como Francia.
Allí, el programa de incentivos no permite acceder a las ayudas a los coches fabricados en China, por lo que el Tavascan no podrá contar con los 4.000 euros que como mínimo se pueden llevar estos modelos. Un inconveniente importante en uno de los principales mercados del coche eléctrico en Europa.
Pero este no es el único problema, y es que la Unión Europea está preparando el incremento de los aranceles a los coches eléctricos fabricados en China, que pasarán de pagar del 10% actual a una cifra que se estima estará entre el 25 y el 30%.
Esto llevaría a Cupra a tener que tomar una decisión: o subir todavía más el precio del coche para mantener el margen de venta, o reducir el margen para no disparar todavía más los precios, que ya se colocan en una zona peligrosamente alta.