Las exportaciones de coches eléctricos de China a Europa se desploman un 30% en junio
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Publicado: 14/08/2024 08:52
La entrada en vigor de los aranceles a los coches eléctricos chinos ha tenido un fuerte impacto en el ritmo de exportaciones de los modelos del gigante asiático. Unos impuestos de entrada que están perjudicando la transición energética al poner freno a unos vehículos más económicos y competitivos que los europeos.
Según los datos publicados por la Cámara de Comercio China ante la Unión Europea, los envíos de coches eléctricos desde el gigante asiático a Europa han caído un 30% durante el pasado mes de junio, con apenas 27.180 unidades.
Esta cifra choca con la que se publicaba hace unos días, donde veíamos como los modelos chinos habían logrado una cuota récord de ventas ese mismo mes, con un 11%, incluyendo crecimientos como el 8% de MG, el 450% de BYD, el 117% de incremento de Great Wall.
En conjunto, los fabricantes chinos acumularon un incremento interanual de sus entregas de un 36% respecto a junio de 2023.
Pero según los datos de la Cámara de Comercio de China, las exportaciones durante ese mismo mes se han reducido en casi un tercio.
La explicación es que los concesionarios europeos han realizado una acumulación de unidades por encima de las ventas, para precisamente adelantarse a la entrada en vigor de unos aranceles que se han activado el pasado 5 de julio.
En cuanto a las cifras acumuladas, en los seis primeros meses del año, los grupos chinos han enviado a Europa un total de 220.000 unidades, lo que representa una reducción del 14.6% respecto al mismo periodo del año anterior.
Unas medidas que desde China se han criticado aludiendo a su impacto en la velocidad de la transformación del transporte desde los combustibles fósiles a la electricidad, un paso crítico para lograr frenar el cambio climático.
Según la Cámara de Comercio de China ante la UE: «Los aranceles serán contraproducentes, y es crucial que China y la UE busquen una solución constructiva a la fricción comercial sobre los vehículos eléctricos, ya sea a través de canales bilaterales o multilaterales. Esperamos una solución justa para todos y que el entorno político europeo sea más propicio a los intereses de las diferentes empresas«.
Por su parte, desde la UE no se han dado síntomas de cambio en su parecer, en un sistema arancelario que tendrá que ser ratificado el próximo mes de noviembre, y que todo hace indicar será confirmado para los próximos cinco años por la mayoría de los miembros del bloque comunitario.
Opinión
Todo hace indicar que no hay vuelta atrás, y que Europa seguirá, tímidamente, los pasos de Estados Unidos e hipotecará el futuro energético de la UE por unos pocos puestos de trabajo. Y es que la dependencia energética europea es enormemente profunda y peligrosa, y revertirla necesitará de grandes esfuerzos durante décadas. Y frenos como este no nos ayudará a lograrlo.