Los fabricantes chinos alcanzan una cuota récord del 11% de coches eléctricos en Europa

Poco a poco, los grupos automovilísticos chinos están aumentando su cuota de ventas de coches eléctricos en Europa. El pasado mes de junio ha marcado un nuevo récord, impulsado por la mayor oferta y demanda, pero también por la entrada de los aranceles que ha provocado un efecto temporal muy importante. Pero los expertos avisan de que el incremento seguirá siendo positivo a favor de los grupos asiáticos.

Los datos de la consultora Dataforce muestran que en junio, las marcas chinas capturaron el 11% del mercado europeo de coches eléctricos en Europa, alcanzando registros récord mientras los fabricantes se apresuraban a apurar las importaciones para tratar de sortear en la medida de lo posible los duros aranceles de la Unión Europea que entraron en vigencia a principios de este mes.

SAIC Motor lideró la iniciativa, de la mano de su popular MG4, que ha vivido un récord de importaciones y automatriculaciones por parte de los concesionarios precisamente para tratar de evitar la mayor subida de aranceles de todas las marcas chinas.

Gracias a esto, los coches que se matriculen antes del 5 de julio habrían podido evitar el aumento hasta el 37.6% de impuestos de entrada, lo que ha permitido matricular un total de 13.366 unidades el pasado mes, con un crecimiento del 8%, que no ha logrado mejorar las cifras acumuladas, que se ven algo frenadas con 44.542 unidades entre enero y junio, un 9% menos que el pasado año a estas alturas.

Por su parte, BYD parece tener un crecimiento más orgánico, y además de menor impacto de los aranceles, el fabricante chino se ha beneficiado de la imagen lograda por la pasada Eurocopa, donde ha sido uno de los principales patrocinadores, y que ha disparado a la marca en el continente.

Esto se ha traducido en unas matriculaciones estimadas de 3.958 unidades en junio, un 350% más que el año anterior, acumulando en lo que llevamos de año 17.048 unidades, o un 469% más que el año anterior a estas alturas.

Otro de los impulsores de las ventas de coches chinos en Europa ha sido la puesta en marcha del sistema de ayudas en Italia, que ha colocado al país transalpino entre los seis primeros mercados, abandonando una cola donde ahora está España.

Una Italia que ahora está trabajando con China para poner en marcha líneas de producción de marcas chinas, que buscan ampliar su capacidad de producción en los mercados objetivo, como Europa.

En general, junio fue el tercer mes más alto en cuanto a volúmenes de coches eléctricos en Europa, con 208.872 matriculaciones en toda la región, detrás de diciembre de 2022 y marzo de 2023, y justo por delante de junio de 2023.

Un crecimiento que rompe con la dinámica negativa instalada en Europa por culpa de un mercado alemán que ha pasado de ser el motor del continente, a ser un lastre para el crecimiento. Una posición que están aprovechando los grupos chinos para posicionar sus marcas y sus modelos, y que les permitirá pescar en el río revuelto de unas marcas europeas totalmente perdidas en cuanto a su objetivo de futuro.