
La red eléctrica resiste la oleada de coches eléctricos en vacaciones: lecciones desde China
Un informe de la Red Estatal de China revela que durante las vacaciones del «Primero de Mayo» en China, la infraestructura de recarga para coches eléctricos en autopistas experimentó un aumento récord del 28% en el volumen de carga y un 12% en el número de sesiones, demostrando la capacidad de la red para soportar una alta demanda en periodos vacacionales.

El reciente incremento en la adopción de coches eléctricos plantea entre muchas personas interrogantes cruciales sobre la capacidad de la red de recarga para satisfacer la demanda en periodos de alta movilidad, como los periodos vacacionales. Un análisis de los datos proporcionados por la Red Inteligente de Vehículos Conectados de la Red Estatal de China durante las vacaciones del «Primero de Mayo» de 2025 ofrece una perspectiva valiosa sobre la resiliencia de la red y las tendencias de uso.
Durante este periodo festivo en China, se observó un aumento significativo en el uso de la infraestructura de recarga para coches eléctricos en autopistas. El volumen de carga alcanzó los 15,9 millones de kWh en dos días, lo que representa un incremento del 28% con respecto al mismo periodo del año anterior y establece un nuevo máximo histórico.
Las predicciones previas de la Red Estatal anticipaban un aumento superior al 10% en el número de recargas en autopista, y los datos finales confirmaron esta tendencia, superando los 1,6 millones de sesiones de carga, un 12% más que el año anterior. Estas cifras sugieren una creciente confianza de los usuarios en la posibilidad de completar viajes de larga distancia a los mandos de sus coches eléctricos y la capacidad de la infraestructura existente para soportar un aumento considerable en la demanda.

Precisamente el argumento de, «¿qué pasará cuando millones de coches salgan al mismo tiempo para las vacaciones en España?» es uno de los más usados por los críticos, que abanderan esta cuestión a largo plazo como si fuese un problema ya mismo.
Extrapolar directamente estos datos al contexto español es muy complicado debido a las diferencias en el tamaño del parque automovilístico, la densidad de la red de carreteras y los patrones de movilidad.
Asumiendo un patrón de uso proporcional a la población y la extensión de la red de autopistas, y considerando que el parque automovilístico español es significativamente menor que el chino, la demanda puntual en periodos de alta movilidad también sería inferior en términos absolutos.
No obstante, la densidad de puntos de recarga por kilómetro de autopista y por usuario de coche eléctrico se convierte en un factor crítico. Si bien, desde la Red Inteligente de Vehículos Conectados de la Red Estatal de China no proporcionan datos específicos sobre la densidad de la infraestructura china, el hecho de que la red haya soportado este incremento sugiere una planificación y despliegue adecuados.

Para un parque móvil español totalmente eléctrico, se requerirá una inversión estratégica y coordinada para aumentar significativamente el número de puntos de recarga de alta potencia en las principales vías de tránsito y áreas de servicio, anticipando picos de demanda similares en términos relativos a los observados en China. Además, habría que modernizar y reforzar las redes de distribución y las subestaciones, para que no lleguen a tener problemas por los picos de demanda.
La planificación futura de la infraestructura de recarga en España debe considerar no solo la capacidad total de la red eléctrica, sino también la distribución estratégica de los puntos de recarga para evitar cuellos de botella en áreas específicas durante los periodos de mayor afluencia.
El uso de sistemas de gestión inteligente de la carga, que permitan optimizar la distribución de energía y minimizar los tiempos de espera, será fundamental.
Asimismo, la colaboración entre el sector público y privado para acelerar el despliegue de una red de recarga robusta, y dotada de sistemas de respaldo que ayuden a mitigar los picos de demanda, se erigen como elementos indispensables para garantizar una transición sin problemas ni sorpresas al coche eléctrico. Unas baterías que además, al estar conectadas a la red, podrán ofrecer respaldo a la red para labores de regulación de la misma. Un negocio por explotar por parte de los operadores de carga pública.
Un caso de éxito en China, otro más, que demuestra que, con una planificación adecuada, el aumento de la movilidad eléctrica en periodos vacacionales es perfectamente gestionable, ofreciendo lecciones valiosas para la estrategia española.