
Así funcionará la mayor batería térmica del mundo
Una nueva batería térmica basada en arena se prepara para cambiar las reglas del juego en el sector energético. Su misión será abastecer de calor a una red urbana de forma limpia, segura y barata. El proyecto está liderado por dos empresas finlandesas y será el mayor del mundo en su categoría.

La compañía finlandesa Lahti Energy ha decidido dar un paso firme hacia una calefacción más limpia y barata en su red de Vääksy, y lo hará con una tecnología poco convencional pero con mucho potencial: una batería de arena. En colaboración con Polar Night Energy, se construirá un sistema de almacenamiento térmico a gran escala capaz de almacenar hasta 250 MWh de energía térmica y con una potencia de calefacción de 2 MW. Una vez finalizado, se convertirá en el mayor sistema de este tipo a nivel mundial.
El objetivo es ambicioso pero claro: reducir al máximo las emisiones y abaratar el coste de la calefacción para los clientes locales. Según estimaciones de la propia empresa, el sistema permitirá recortar en torno a un 60% las emisiones generadas por combustibles fósiles, lo que se logrará principalmente gracias a una reducción del 80% en el uso de gas natural y un menor consumo de astillas de madera.
“La idea es ofrecer calefacción asequible y apostar de forma decidida por la energía renovable”, explica Jouni Haikarainen, director general de Lahti Energia. Pero el sistema no solo servirá para la calefacción: también podrá participar en los mercados de reserva energética y equilibrio de red, algo especialmente relevante a medida que las fuentes de energía dependientes del clima, como la solar o la eólica, van ganando terreno.
Una batería térmica sin química: solo arena y calor

Las baterías de arena como esta no tienen nada que ver con las eléctricas al uso. En lugar de químicos o metales, utilizan arena común para almacenar energía en forma de calor, alcanzando temperaturas superiores a los 500 grados centígrados. El funcionamiento es relativamente simple: se calienta la arena con electricidad procedente de fuentes renovables y se conserva el calor durante largos periodos. Luego, este calor puede liberarse para generar vapor o, como en este caso, alimentar una red de calefacción urbana.
“Estamos muy contentos con este acuerdo. Es un paso enorme para ambas empresas en nuestro camino hacia la descarbonización”, afirma Tommi Eronen, director ejecutivo de Polar Night Energy, que será la encargada de liderar la construcción del proyecto.

Los trabajos en el terreno comenzarán a principios de 2026, con la puesta en marcha prevista para el verano de 2027. El sistema ocupará un volumen considerable: una torre de 14 metros de altura y 15 metros de ancho, acompañada de un edificio técnico independiente. Para su funcionamiento se emplearán unas 2.400 toneladas de arena natural, disponible localmente.
No es la primera vez que Polar Night Energy se embarca en un desarrollo de este tipo. Su anterior batería de arena, construida para Loviisan Lämpö en la localidad de Pornainen, lleva medio año en funcionamiento y ha demostrado un rendimiento sólido y fiable en condiciones reales. A raíz de este éxito, la empresa se encuentra negociando nuevos proyectos tanto para calefacción urbana como para procesos industriales.
La tecnología ha comenzado a llamar la atención fuera de Finlandia. De hecho, la batería de arena ha sido incluida en la lista de Mejores Inventos de 2025 por la revista TIME, además de recibir premios en certámenes como el Capgemini Nordic Sustainability Tech Award o el reconocimiento especial en la cumbre climática COP30. Todos estos galardones apuntan en la misma dirección: el almacenamiento térmico de alta temperatura puede ser clave en la descarbonización de la industria.
Fuente | Polarnightenergy


