La autonomía del Renault ZOE llegará a los 340 kilómetros para el 2020
El jefe de investigación de Renault nos ha dejado un interesante comentario. Esta ha tenido lugar durante una entrevista donde hablaba del proyecto de lanzar un híbrido enchufable a corto plazo.
Al final de la entrevista, el Sr Remi Bastien ha dicho que en los próximos años los avances en cuanto a baterías para coches eléctricos serán espectaculares. Según este, la industria está al 50% en cuanto a investigación, y que según se incremente la importancia de los eléctricos, lo hará también la velocidad del desarrollo de sus baterías.
Esto llevará según Bastien la autonomía del Renault ZOE hasta los 340 kilómetros con cada carga. Una cifra que lograría con la segunda generación de baterías que se espera que para 2020 hayan también alcanzado un nivel de madurez económica importante. Esto supondrá que para esas fechas, apena seis años por delante, los eléctricos además de una cifra de autonomía destacable, también serán económicamente competitivos.
Una de las claves para lograr esta cifra según Bastien, la reducción de pesos es menos importante en un eléctrico que en un diésel o un gasolina. Para un modelo impulsado por un motor eléctrico, la aerodinámica es la clave para mejorar su eficiencia, ya que el peso puede ser una ayuda a la hora de regenerar energía en las frenadas. Preguntado por la apuesta de BMW por la fibra de carbono, el directivo de Renault ha comentado que se trata de un planteamiento diferente. Una estrategia destinada a mejorar las prestaciones, no por la eficiencia que esta le pueda proporcionar.
Híbrido enchufable de Renault
Pero el tema que ha protagonizado la comparecencia del Sr Bastien se ha centrado en una nueva estrategia. Se trata de un paso atrás, o para un lado, de Renault. Abandona su apuesta 100% eléctrica por una donde los híbridos enchufables tendrán su papel.
Según el directivo de Renault, el primero de estos modelos que llegue a la calle será un compacto tipo Renault Clio. De momento no hay detalles, pero el objetivo es lograr que este logre un consumo medio de apenas 2 litros cada 100 kilómetros. Pero el gran objetivo para el fabricante francés es lograr un precio competitivo.
Y es que los híbridos enchufables no suelen ser precisamente económicos. La idea es combinar un eficiente motor gasolina turbo, con un motor eléctrico. Se completaría la ecuación con un pequeño pack de baterías. De esta forma Renault aprovecharía tanto una plataforma ya existente, como una mecánica y un sistema eléctrico también ya desarrollado. El resultado sería un modelo competitivo a nivel de costes.
Sin duda se trata de un movimiento extraño en el fabricante que hasta el momento lo había apostado todo a los eléctricos puros. Ni híbridos, ni pila de combustible. Eléctricos 100%. Es de suponer que se trata de un movimiento para diversificar una fuerte inversión que a la vista de las bajas ventas, necesita otros escenarios para ser rentabilizada.
Vía | Autoexpress | Tecmovia