El nuevo eléctrico de Volkswagen tiene 730 km de autonomía y carga ultrarrápida
Volkswagen quiere recuperar terreno en el mercado chino, y para ello está preparando una nueva ofensiva de producto liderada por el recién presentado ID. UNYX 08, un SUV eléctrico desarrollado con XPeng.
El Volkswagen ID. UNYX 08 es una de las grandes novedades que prepara el fabricante alemán de cara al año que viene. Este SUV eléctrico de gran tamaño desarrollado en colaboración con XPeng forma parte de una nueva ola de productos diseñados específicamente para el mercado chino. Su producción se llevará a cabo en Anhui, donde el grupo también ensambla en CUPRA Tavascan vendido en Europa.
Con 5.00 metros de largo, 1.95 metros de ancho, una altura de entre 1.67 y 1.69 metros y una distancia entre ejes de 3.03 metros, nuestro protagonista se encuadra en el segmento E (SUV ejecutivos). Por lo tanto, se sitúa un peldaño por encima del ID.6, viniendo a ser una suerte de equivalente eléctrico del Touareg, que abandonará el mercado en 2026 tras más de dos décadas como buque insignia de la firma germana.
En su momento se anunció que se ofrecería con dos opciones mecánicas: single motor de 313 CV (230 kW) y dual motor con 190 CV (140 kW) adicionales. Ahora también se ha revelado que también tendrá dos baterías de 82 y 95 kWh de capacidad, las cuales le permitirán homologar una autonomía de entre 630 y 730 km CLTC dependiendo de la versión. Las celdas serán suministradas por el gigante CATL.
El vehículo contará con una arquitectura de 800 voltios, una tecnología cada vez más común entre los coches eléctricos chinos de gama media y alta. Gracias a este avance, disfrutará de unos tiempos de carga muy ajustados, si bien la compañía todavía no ha revelado las cifras exactas. Esto supondrá un importante salto adelante respecto a anteriores propuestas eléctricas de la empresa, que se estaba quedando descolgada frente a la competencia local.
El ID. UNYX 08 es producto de la colaboración de Volkswagen con XPeng
El ID. UNYX 08 empleará la arquitectura electrónica CEA (China Electronic Architecture), desarrollada en colaboración con XPeng. Entre otras cosas, será compatible con actualizaciones de software vía OTA (Over-the-air); además, el vehículo también contará con un asistente de Inteligencia Artificial. Otro punto de interés será su sistema de asistencia a la conducción de nivel 2++, el cual contará con funciones de aparcamiento inteligente.
Desde un punto de vista estético, nuestro protagonista tiene poco que ver con otros Volkswagen. Su lenguaje de diseño es específico para el mercado chino, con un frente desprovisto de calandra y unos afilados grupos ópticos que convergen hasta prácticamente toca el logo. Eso sí, las funciones principales de iluminación se concentran en un módulo separado situado en una posición más baja, el cual se disimula mediante una máscara negra.
El pilar A en negro busca crear un efecto visual de techo flotante, mientras que los tiradores de las puertas escamoteables buscan optimizar la aerodinámica de la carrocería. En la zaga nos encontramos una firma lumínica similar a la del frontal, con unos pilotos alargados. Curiosamente, la luz de freno incluye un escudo con un lobo, un guiño a la sede de Volkswagen: Wolfsburgo.
