Hace unas semanas hemos visto como la empresa francesa Symbiofcell presentaba una adaptación de la furgoneta eléctrica Kangoo ZE. Esta además de su batería original, contaba con una pequeña célula de hidrógeno que funcionaba como un extensor de autonomía.
Ahora el gigante de la distribución, Federal Express, ha puesto su mirada en esta idea, y probará con una pequeña flota de 20 furgonetas eléctricas, que gracias a este sistema, podrán doblar su autonomía en las jornadas donde la original no sea suficiente.
La idea es dotar de mayor flexibilidad a los modelos 100% eléctricos. Estas unidades cuentan con una autonomía media de 130 kilómetros con cada carga. Suficiente para una jornada media, pero que se queda algo ajustada cuando el clima se vuelve algo menos benigno, o cuando hay picos de trabajo y que gracias a la pila de hidrógeno alcanzará los 260 kilómetros.
Una de las curiosidades de este proyecto es que cuenta con el apoyo de Departamento de Energía de los Estados Unidos (DOE). Un organismo que hasta ahora no había prestado mucha atención ni medios a la pila de combustible de hidrógeno, pero al que parece que su aplicación como extensor de autonomía, si le resulta interesante.
Está claro que el hidrógeno tiene nichos de mercado donde poner su primera piedra. El sector profesional, y como extensor de autonomía, pueden ser una oportunidad de aumentar su producción, y reducir sus elevados costes de fabricación. Pero el salto al mercado de los turismo será otra cosa, e incluso el presidente del grupo Daimler, ha asegurado que hasta dentro de 10 años la pila de combustible será decepcionante.
Vía | Hydrogenfuelnews
