Apple confirma que trabaja en un sistema de conducción autónoma para «cambiar el futuro del transporte»
El coche eléctrico de Apple es una tema que ha hecho correr ríos de tinta desde que se empezaron a oír los primeros rumores. Al final, después de muchos idas y venidas, Apple parece que finalmente ha descarrilado su proyecto para lanzar un coche eléctrico, al menos de momento. Sin embargo, Apple no renuncia al desarrollo de un sistema de conducción autónoma.
En una carta enviada por Apple a la NHTSA, la compañía de la manzana pide al gobierno que no restrinja las pruebas de coches autónomos. En la carta, escrita por Steve Kenner de Apple, la compañía comenta el plan recientemente anunciado por el Departamente de Transporte de Estados Unidos, el cual tiene como objetivo garantizar un despliegue seguro de los vehículos altamente automatizados.
En la carta, Apple explica que utiliza «Machine Learning» o aprendizaje automático en muchos aspectos, incluido el transporte. Una forma de confirmar que actualmente está desarrollando este tipo de tecnología.
«Apple utiliza el aprendizaje automático para hacer sus productos y servicios más inteligentes, más intuitivos y más personales. La compañía está invirtiendo fuertemente en el estudio del aprendizaje automático, y está muy entusiasmado con el potencial de los sistemas automatizados en muchas áreas, incluyendo el transporte.»
Apple cree que tanto los fabricantes ya establecidos como los nuevos actores deberían ser tratados de forma igual en cuanto a las pruebas de conducción autónoma, de tal forma que se puedan maximizar los beneficios de esta tecnología. Esto significa que Apple podría hacer pruebas similares a las que haría Ford, a pesar de que sea una empresa nueva en el mundo de la automoción.
Al parecer, Apple habría dejado de lado la fabricación de coches eléctricos para centrarse en el desarrollo de un sistema de conducción autónoma, algo más simple para una empresa tecnológica como ella.
La mayoría de fabricantes hablan de la llegada de sistemas de conducción autónoma en 2020-2021. Todos menos Tesla, quien quiere unos plazos más cortos y presiona equipando a todos sus nuevos coches con el hardware necesario. Sin embargo, todos estos esfuerzos están supeditados al desarrollo de una legislación que acompañe a este tipo de conducción. Una legislación que sin duda, será difícil de llevar a cabo.
Fuente | Venturebeat