Cuando parecía que los problemas para Fisker comenzaban a quedar atrás, después de la congelación de los préstamos del Departamento de Energía norteamericano, los graves problemas de las baterías de algunas unidades y varias llamadas a revisión, ahora un nuevo suceso vuelve a poner en la primera página al eléctrico Karma.
Se trata de una combustión espontánea de una unidad en la localidad californiana de Woodside, cuyo propietario había dejado aparcada para realizar unas compras en un centro comercial, y al volver se ha encontrado con una escena dantesca, con el eléctrico de 100.000 euros ardiendo por completo. De momento apenas hay detalles de lo sucedido y habrá que esperar a la investigación para saber donde ha comenzado este fuego, pero no se trata del primero, y hace unos meses una unidad aparcada en el garaje de su propietario también ha sido pasto de las llamas.
Esto vuelve a poner sobre la mesa un posible problema de las baterías fabricadas por A123, y que ya han causado algún incidente tanto en el Karma como en el Chevrolet Volt, entre los que se incluye un par de incendios, uno después de ser sometida a un test de impacto, y otro mientras estaba recargando en su casa.
Estaremos atentos a como evoluciones la investigación que nos aclare donde ha estado el origen de un fuego que de nuevo se ha convertido en el quebradero de cabeza de un pequeño fabricante que está luchando por su supervivencia.
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Fuente | Jalopnik