Alemania sigue siendo optimista, 1 millón de coches eléctricos para el 2020

A pesar de la débil demanda de los coches eléctricos, la presidenta alemana Angela Merkel sigue siendo optimista y mantiene las previsiones establecidas en 2009, cuando aseguraba que Alemania tendría al menos 1 millón de coches eléctricos circulando por sus carreteras para el 2020, una cifra muy optimista incluso a estas alturas ya que en 2012 apenas 3.000 unidades han salido de los concesionarios germanos.

Pero a pesar de esto, la industria alemana apostará fuerte por la movilidad eléctrica con una inversión de unos 12.000 millones de euros en los próximos cuatro años, una fuerte inyección destinada al desarrollo de motores eléctricos y sistemas de baterías mejores que permitirán además una rebaja del precio de los vehículos, para los alemanes la principal barrera actual de esta tecnología por delante de la autonomía.

No hay lugar a dudas que el desembarco de la industria alemana en el segmento de los eléctricos, y la incorporación del principal mercado de Europa en la compra de estos modelos, supondrá un fuerte impacto para una industria que está alas puertas de una explosión comercial, pero que de momento no ha logrado despegar en cuanto a cifras, exceptuando casos como el de Noruega.

Según un estudio, en Alemania la cantidad de personas que están dispuestas a pagar un sobre precio por un coche eléctrico ha bajado en los últimos años del 44% del 2011, a apenas el 27% de este año, una señal que debe indicar a los fabricantes donde incidir en sus esfuerzos, los precios, antes incluso que en las autonomías o en los tiempos de recarga, aspectos que también son imprescindibles pero que no tiene sentido sin un precio que la gente pueda o no quiera pagar.

Pero para los alemanes la botella está medio llena, y de esa manera a pesar de la dedil demanda, desde 2007 las cifras de ventas se han ido multiplicando cada año, eso a pesar de no contar con una mínima oferta por parte de sus fabricantes nacionales, algo que cambiará a finales de este año y sobre todo a lo largo del 2014, cuando constructores como Volkswagen, Audi, BMW y Mercedes pongan en la calle sus primeros modelos.

El principal problema de estos será su precio, un elevado coste habitual en sus modelos con motor de combustión que suponemos trasladarán a los eléctricos, y que pondrán a prueba la fidelidad de sus compradores ante una oferta de modelos como los Renault o Nissan mucho más económicos, algo importante en un país que no cuenta con ayudas públicas para la adquisición de coches eléctricos.

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Fuente | Euronews