La producción de Tesla podría alcanzar las 100.000 unidades en 2016, y las 800.000 para el 2020

Un estudio de la revista económica Forbes se ha lanzado a pronosticar como será la evolución de la producción de la fábrica de Tesla, una instalación de la que este año apenas saldrán 21.000 unidades y que será sólo el principio de una escalada sin final a la vista.

Según este informe, el próximo año Tesla logrará una producción de unas 40.000 unidades teniendo en cuenta el aumento de la producción del Model S, y también la llegada de la variante Model X, el todocamino eléctrico, dos versiones que lograrán duplicar las ventas de un año para el otro.

Pero esto parece que será solamente el principio y según Forbes para el 2016 gracias a los dos modelos anteriores unido a la llegada ese año de la versión más accesible del fabricante norteamericano, el Model C, las entregas llegarán a las 100.000 unidades al año, una producción más que respetable.

El estudio va más allá y se atreve a mirar a más largo plazo, estimando que para finales de la década Tesla, gracias a una amplia gama de vehículos eléctricos, una importante mejora de sus instalaciones, la internacionalización de sus ventas y la bajada de precios, logrará alcanzar una producción de nada menos que 800.000 unidades al año, de los cuales 200.000 corresponderán al Model S y Model X, mientras que el grueso de las ventas corresponderán al futuro Model C.

Por supuesto se trata de una tarea titánica para un fabricante que hace menos de una década ni existía, pero hasta el momento Elon Musk, su presidente y fundador, nos ha demostrado que conocen la receta y saben como aplicarla, a lo que podemos sumar que no tienen cuentas pendientes con nadie y pueden empujar la tecnología al máximo sin riesgo de destaparse los pies, uno de los problemas de los fabricantes tradicionales que con el aumento de las ventas de eléctricos ven como pierden cuota de mercado sus rentables modelos con motor de combustión y que da vía libre a Tesla para hacerse con una buena parte del mercado.

Vía | Forbes