Repitiendo errores: Parte 2. El nuevo Chevrolet Volt tendrá un cargador de 3.6 kW

Hace unos días hemos sacado un artículo hablando de los errores que General Motors estaba repitiendo con la nueva versión del Chevrolet Volt. Aunque faltan todavía por desvelar información clave, lo que sabemos nos da una idea de que el nuevo Volt será muchas cosas, pero no revolucionario.

La primera es que la autonomía eléctrica no aumentará tanto como esperábamos. Según las filtraciones de GM, las celdas se verán reducidas, pero se incrementará su densidad energética. El resultado será una batería más pequeña, pero con más autonomía eléctrica. Este incremento no llegará a los niveles que esperábamos, y se quedará en torno al 20%, pasando de los 61 a los 73 kilómetros según el ciclo EPA.

Otro detalle es que el motor de combustión que hace las veces de generador, no verá reducido su tamaño y su cilindrada, como era también de esperar. En lugar de instalar el pequeño y eficiente motor 1.0 que llevará el nuevo Opel Corsa, GM ha seleccionado un motor todavía más grande que el actual, creciendo hasta los 1.5 litros.

Ahora hemos sabido que el nuevo Volt montará un cargador de apenas 3.6 kW. Esto supone un ligero incremento respecto a los 3.3 kW que dispone la actual versión. Un salto que parece a todas luces muy pequeño si tenemos en cuenta que la mayor parte de los coches que hay en el mercado ya disponen de un cargador de 6.6 kW.

Según las estadísticas, la mayor parte de los propietarios norteamericanos del Volt realizan sus recargas en sus viviendas durante la noche. Para ello usan el cargador de serie, con entre 8 y 12 amperios, y raramente usan el cargador de 3.3 kW. Este se deja para recargas fuera de casa. Precisamente es aquí donde el tiempo suele ser un factor muy importante, y donde un cargador de mayor potencia permitiría una recuperación de la carga mucho más rápida.

Queda por saber si finalmente la batería mantendrá su forma de T, ocupando una de las plazas traseras y parte del maletero, o en este aspecto GM ha logrado mejorar el modelo lanzado ya hace casi cuatro años. También clave será un precio que desde el propio fabricante se aseguraba que sería miles de euros más económico, y que las apuestas sitúan a la altura del coste del Nissan LEAF.

Las respuestas las tendremos en el Salón del Automóvil de Detroit de este mes de enero, o en una próxima filtración.

Vía | Motor Trend