Los proveedores de los fabricantes de vehículos de Alemania no se están adaptando a la electromovilidad

Vivimos una etapa de transición en la que el motor térmico y toda la industria relacionada con él está dejando paso a otras formas de transporte de pasajeros y mercancías, fundamentalmente los transportes impulsados por energía eléctrica. Un cambio que se está viviendo con cierta celeridad y al que no todo el mundo está consguiendo adaptarse.

Lucas Flöther, experto en análisis de insolvencia de empresas, avisa de que una ola de quiebras afectará a numerosos proveedores de la industria automovilística alemana, a los comercios minoristas como casas de recambios y a gran parte de la industria de Alemania Oriental: «Las bancarrotas ya están aumentando ligeramente en estos sectores y se intensificarán significativamente el próximo año«.

Esto se debe principalmente a lo que él llama «zombies corporativos», es decir, empresas que han desempeñado su día a día sin un plan de negocios viable y competitivo. Muchas empresas dedicadas al apoyo del sector de la automoción han trabajado por pura inercia y no se están adaptando al cambio de modos de transporte que se está viviendo. Flöther apunta a que 305.000 empresas de toda Alemania están comenzando el año fiscal con problemas financieros, lo que significa un mayor riesgo de insolvencia.

Este problema es particularmente importante en zonas como Sajonia, donde aproximadamente el 12% de las empresas están calificadas como «en peligro de extinción». Dato que contrasta con el de regiones como Bavaria, donde esta cifra de empresas en peligro baja hasta el 6’4%. Flöther asegura que toda esta debacle se debe a que Alemania ha apostado muy fuerte por el motor diésel, y los cambios en el sector le están afectando duramente, ya que el proceso de adaptación puede ser más costoso que en otros países.

«Muchas empresas estaban enmascaradas bajo las reducidas tasas de interés de los préstamos y el buen ritmo de la economía en general, pero no tienen una perspectiva de continuidad ni un plan para el cambio de la industria automotriz. Esto va a salir a la luz ahora«, declara Lucas Flöther. Y además, avisa: «Si el mercado se rompe para toda una industria o sector, ni el mejor experto en reestructuración puede ayudar«.

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