Las señales indican que al menos hasta 2020 no habrá un incremento importante en la producción de baterías para coches eléctricos que usen celdas de LG

Las señales indican que al menos hasta 2020 no habrá un incremento importante en la producción de baterías para coches eléctricos que usen celdas de LG

3 min. lectura

Publicado: 05/07/2018 10:16

Hemos podido ver que en algunos mercados los pedidos de los nuevos coches eléctricos están superando de largo la capacidad de producción de las marcas. Lo han sufrido veteranos como el Renault ZOE, el Nissan LEAF, el Volkswagen e-Golf, y nuevas propuestas como el Hyundai Kona. El problema no es sólo que las marcas que están apostando fuerte por los mismos, sino que los suministradores de baterías no cuentan con una suficiente capacidad de producción para atender los pedidos que están entrando.

Es el caso de la coreana LG. Estos han firmado un acuerdo para asegurarse el suministro de hidróxido de litio con la firma de un contrato de 5 años de duración con la canadiense Nemaska Lithium. Un contrato que debería permitir disparar el ritmo de fabricación en las plantas dedicadas a la producción de baterías para coches eléctricos de los coreanos.

Pero no parece que sea el caso. Si miramos en los detalles de la operación, vemos que este acuerdo no entrará en vigor hasta la segunda mitad del 2020. Por lo tanto, dos años por delante para que se active. No es la única señal negativa, y es que este contrato supone la entrega de 7.000 toneladas de litio al año, suficientes para lograr producir unas 140.000 baterías en cada ejercicio.

Una cifra claramente insuficiente, sobre todo cuando hablamos de LG, que tiene contratos con los principales fabricantes de coches eléctricos, desde General Motors, Renault, Volvo, Volkswagen, Hyundai, KIA...etc. Un amplio mercado que no ha supuesto una inversión lo suficientemente elevada como para atender una demanda en plena explosión.

Como ejemplo podemos poner los 1.300 millones que LG invertirá en la planta que tiene en Polonia. Una instalación que se encargará de la demanda de los fabricantes europeos, y que cuando esté a plena actividad alcanzará un nivel de producción de 6 GWh, o 100.000 packs de 60 kWh al año. Una cifra que podemos comparar con los 20.000 pedidos que ha tenido el Hyundai Kona eléctrico solo en Noruega en un par de semanas.

Unas cifras que podemos comparar con los planes de otras, como Tesla o Northvolt, que quieren llegar a los 35 GWh para 2020 con una inversión de más de 4.000 millones de euros, o el proyecto de la china CATL, que prepara una instalación europea que supere las anteriores cifras, y que ya cuenta con el apoyo de marcas como BMW o Volkswagen.

Relacionadas | BMW firma un contrato de 1.000 millones de euros con CATL para el suministro de baterías para coches eléctricos en Europa

Vía | Koreajoongangdaily