Realmente sorprendente la dinámica que ha tenido la vida de la versión eléctrica del mítico Golf. El compacto alemán ha visto como sus cifras de ventas vivían una dinámica inversa a lo habitual en el mercado, con un importante incremento justo a las puertas del final de su vida útil, y eso a pesar de la cercanía de la llegada de su sustituto, el ID.3.
Ahora Volkswagen ha tenido que celebrar un hito realmente inesperado para todos como ha sido que el eGolf haya llegado a las 100.000 unidades vendidas. Todo un logro para un modelo lanzado en 2014 sin grandes expectativas por parte de la marca, que apenas ha promocionado o empujado unas ventas que a pesar de todo no han parado de incrementarse.
Según Holger B. Santel, Jefe de Ventas y Marketing de Alemania, dijo: “El e-Golf ya ha sido nuestro embajador dentro del sector de la movilidad eléctrica durante más de cinco años. El hito de entrega de hoy de la unidad número 100,000 es la confirmación de su éxito.»
Para Volkswagen, este modelo juega un papel importante en el cambio de la mentalidad de los conductores, tanto el comprador como su entorno, que permite allanar el camino para el nuevo ID.3. Un ejemplo de que además de ser un modelo de compromiso, esta variante se ha convertido además en un emblema del cambio de una marca golpeada duramente por el escándalo de las emisiones diésel y que ahora ha tomado una nueva dirección hacia la electrificación.
Por supuesto la bajada de precio y las ofertas han impulsado a un e-Golf que este año logrará alcanzar unas entregas entre enero y octubre de 27.900 unidades, lo que permite superar las entregas del 2018 al completo y situarse entre los cinco primeros clasificados de los coches eléctricos más vendidos en Europa este año. Una cifra que supondrá un récord para el compacto que verá como su más que probable último año completo en el mercado será el de mayor número de ventas. Algo inaudito en la industria del automóvil.
A la vista de estas cifras, y de la buena acogida del ID.3, unido a que ambos modelos se producen en fábricas diferentes, hace que aparezcan rumores de que tal vez la producción del e-Golf continúe al menos un año más. Algo que tendría sentido por la entrada en vigor de las nuevas normas sobre emisiones que hará necesario el aporte de la mayor cantidad posible de coches eléctricos en el balance.
Un e-Golf que podría situarse como una alternativa de coste intermedio dentro de la oferta de Volkswagen, ligeramente por encima del e-Up que recordamos arranca en España desde 22.570 euros, mientras que el ID.3 más económico (330 km de autonomía WLTP) lo hará en torno a los 30.000 euros.
Por lo tanto el e-Golf podría jugar una baza con un precio en torno a los 25.000 euros, para aquellos a los que los 100 kW de su motor, y los 230 km de autonomía WLTP sean más que suficientes.
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Fuente | Volkswagen