NIO recibe una inversión de 1.000 millones de dólares y esquiva la bancarrota

NIO es uno de los fabricantes de coches eléctricos de origen chino más interesantes del panorama junto con BYD y BYTON, entre otros. La firma, que actualmente cuenta con tres modelos a la venta (los SUV eléctricos ES6, EC6 y ES8, a los que habría que sumar la versión de producción del hiperdeportivo EP9, la cual todavía no está a la venta), ha pasado en los últimos tiempos por una serie de dificultades económicas, las cuales aparentemente están próximas a su fin.

Debido a la recesión del mercado local, NIO experimentó un difícil año 2019, con unos bajos niveles de ventas que conllevaron unas pérdidas valoradas en varios miles de millones de dólares. El bajo ritmo de producción, el elevado coste de fabricación de sus vehículos, una llamada a revisión masiva que afectó al 20% de todos los coches que había producido… Los ingredientes para el desastre estaban servidos.

A esto habría que sumar el rechazo del gobierno de la ciudad china de Zhejiang a los planes de NIO para construir una fábrica en la región. Algo similar ocurrió con el gobierno de la ciudad de Huzhou, donde NIO estaba estudiando la construcción de una segunda planta con capacidad para 200.000 vehículos al año. Según la evaluación realizada por las autoridades, la inversión supondría un gran riesgo, lo que motivó el fin de las negociaciones.

La detención de su producción durante varios meses a raíz de la crisis del coronavirus no hizo más que empeorar las cosas para el fabricante de coches eléctricos, cuyo futuro sin embargo es ahora un poco más brillante, pues ha recibido una inyección de 1.000 millones de dólares por parte de la compañía de construcción estatal Hefei City Construction and Investment Holding, lo que sobre el papel debería permitir a la empresa sobreponerse a todos sus problemas económicos.

A pesar de la pandemia mundial, NIO ha visto incrementadas sus ventas en un 11,7% en marzo respecto al mismo mes en 2019. Con un total de 1.500 unidades entregadas, todo parece indicar que poco a poco el fabricante asiático comienza a ver la luz al final del túnel, algo a lo que ayudará el hecho de que el gobierno chino ha tomado la decisión de bonificar a los coches eléctricos que cuenten con sistemas de cambio de batería, una tecnología que NIO lleva ya tiempo defendiendo.

Este mismo año NIO ha comenzado a vender el restyling de su modelo ES8, el cual además ha estrenado un nuevo pack de 100 kWh (en 2018 se ofrecía con unas baterías de 74 kWh, las cuales se actualizaron a 80 kWh en 2019). El pack también podrá ser instalado en unidades fabricadas con anterioridad: los propietarios tendrán que pagar unos 5.000 dólares por la operación, o alquilar las nuevas baterías por unos 100 dólares al mes.

Tampoco hay que perder de vista la llegada del antes mencionado EC6, la versión «coupé» del ES6. Este ambicioso modelo promete una autonomía máxima de 613 km NEDC gracias al pack de 100 kWh, una cifra muy competitiva similar a la de modelos de categoría superior como el BYD Han EV. Gracias a su avanzado sistema de tracción total podrá hacer un 0 a 100 km/h en 4,7 segundos.

Relacionadas | NIO presenta el SUV mediano EC6, el restyling del ES8 y sus nuevas baterías de 100 kWh