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Remolcar una caravana no impacta en la autonomía del coche eléctrico… si esta también lleva baterías y motores

Demostrado quedó que el hecho de remolcar con un coche eléctrico produce una merma evidente en la autonomía, debido al peso adicional y a mucha resistencia aerodinámica añadida. Sin embargo, el fabricante Dethleffs, en colaboración con Erwin Hymer Group y ZF, han probado una solución que está cercana a ser una realidad comercial, el E.HOME.

Se trata de un remolque de caravana aparentemente normal, pero que cuenta en el chasis con sendos paquetes de baterías de 40 kWh y dos motores eléctricos, además de los sistemas auxiliares. En teoría, el sistema está diseñado para que el vehículo tractor apenas se entere de que lleva lastre, porque el propio remolque está autopropulsado. La idea solo tiene una pega importante, homologar tal cosa no es sencillo.

Para probar su viabilidad, realizaron un viaje con un Audi e-tron Sportback entre Isny im Allgäu (Alemania) y Riva (Italia), distando 386 kilómetros, por lo que a priori el Audi tendría que cargar por narices antes de llegar. No fue así, ambos vehículos, remolcador y remolque, realizaron el viaje a una media de 62,3 km/h, eso sí, sin superar los 90 km/h en vías rápidas.

Dethleffs E.HOME

En el paso del Brennero, que está a 200 km del origen y 180 km del destino, tanto el Audi como el E.HOME disponían de más del 50% de su capacidad de carga. Téngase en cuenta que tuvieron que enfrentarse a viento en contra, muy importante tirando de un remolque. El viaje concluyó con un consumo de 82 kWh por parte del Audi (21,24 kWh/100 km) y de 74 kWh por parte del E.HOME (19,17 kWh/100 km).

El remolque puede aportar una potencia continua de 30 kW/41 CV con cada motor, pudiendo alcanzar los 90 kW/122 CV en pico. Aportan muy poquito par, apenas 90 Nm, pero con su transmisión puede convertir eso en 1.440 Nm a la rueda -reducción 16:1-. Se trata de motores asíncronos que funcionan a 330 voltios. El remolque puede cargarse hasta a 7,2 kW en corriente alterna o 50 kW en corriente continua -recarga rápida-. Los dos paquetes pesan 600 kg.

El E.HOME dispone de placas solares, pero son inútiles en marcha, solo alivian el consumo en modo camping. Una vez se puedan salvar los obstáculos regulatorios, es una tecnología próxima a poderse producir en serie. El precio sería una barrera de entrada, aunque tendría sentido arrendar el remolque, como si fuese normal y corriente, para no tener que arrastrar los costes además del propio remolque.

Dethleffs E.HOME

El secreto de este remolque consiste en aplicar todo el par que hace falta para que la presión sobre la bola de remolque sea la misma, así el vehículo tractor apenas tiene que hacer un esfuerzo adicional. Además, se puede compatibilizar con vehículos de motor convencional y poca potencia, ya que el remolque es autopropulsado. El objetivo es quedarse en 400 kg de sobrepeso respecto a una caravana remolcada estándar.

Se podrá hilar más fino en cuanto a capacidades de batería del E.HOME para no superar los límites admisibles de masa remolcable del vehículo tractor, así como no superar la masa total admitida del conjunto y evitar que haga falta una licencia de conducción diferente a la exigida para llevar cualquier remolque. Ya hay varias empresas trabajando en este aspecto.

Nos viene a la mente la vieja idea de utilizar un remolque como suerte de extensor de autonomía del vehículo tractor. En este caso, la autonomía original se mantiene, no se aumenta. Se han hecho varios prototipos, fundamentalmente son remolques pequeños y que no añaden una gran capacidad de batería. Sigue sin ser una idea muy madura, pero si se aprovecha el porte y se lleva una caravana a cuestas, parece más viable.

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