El presidente de Nissan en Europa, Guillaume Cartier, ha confirmado que NISMO, la división deportiva de la compañía, seguirá los pasos de su matriz y se electrificará en los próximos años. «NISMO es un activo que tenemos, y eso es algo que queremos revitalizar. ¿Tendremos algunos, digamos, modelos con su correspondiente derivado NISMO? La respuesta es sí».
Lo cierto es que Nissan ya ha comercializado un coche eléctrico con las insignias de NISMO: el LEAF. Sin embargo, el LEAF NISMO no incluía ningún cambio en su tren motriz, diferenciándose solo por un kit estético más llamativo, un chasis con unos amortiguadores específicos y una serie de pequeñas mejoras de software (centralita modificada para mejorar la respuesta del acelerador, dirección, ABS y control de estabilidad recalibrados…). Tampoco podemos olvidarnos del LEAF NISMO RC de competición.
Hasta 2030, Nissan lanzará quince nuevos modelos eléctricos. Además del ya conocido Ariya, cuya versión más deportiva (394 CV/290 kW) recibe simplemente el apellido Performance, en los próximos años su oferta europea se reforzará con un nuevo Micra eléctrico (2024), así como con un crossover llamado a sustituir al LEAF (2025).
Dado que el Nissan Micra derivará del Renault 5, el cual disfrutará de una variante de altas prestaciones firmada por Alpine, es muy probable que también cuente con su propio derivado NISMO. El 5 Alpine equipará el mismo motor de 218 CV (160 kW) que podemos encontrar en la versión EV60 del nuevo Megane E-TECH Electric.
Los NISMO eléctricos tendrán un tren motriz específico
Dado que el Ariya es un producto global que debe enfrentarse a rivales de la talla del Tesla Model Y, tampoco sería de extrañar que por encima del Performance se lance una versión NISMO; no en vano, Alpine está desarrollando una evolución de la plataforma CMF-EV que incluirá, entre otras cosas, un eje trasero con dos unidades eléctricas y ruedas directrices.
En cualquier caso, todo apunta a que Nissan quiere hacer borrón y cuenta nueva respecto a la anterior estrategia seguida con NISMO, pues durante la década pasada se lanzaron muchos modelos que, a pesar de contar con un agresivo kit de carrocería firmado por la división deportiva, mecánicamente no se diferenciaban lo más mínimo de los Nissan de los que derivaban.
«Eso requiere cierta inversión para asegurarnos de lograr un buen rendimiento. Es relativamente fácil de entender [a lo que nos referimos]: suspensión y tren motriz específicos. En el caso del Ariya es un desafío porque ya tenemos una gran batería con un alto rendimiento. Así que tenemos que ir todavía más allá».
Fuente | Top Gear