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Opel quiere que sus próximos coches eléctricos tengan un diseño más diferenciado de la competencia

Opel quiere que sus próximos modelos tengan un diseño más distintivo que su gama actual. La firma alemana, que pasará a ser 100% eléctrica en 2028, continuará evolucionando el lenguaje de diseño estrenado por el Mokka de segunda generación, el cual también puede encontrarse en el recientemente renovado Astra.

«Pensamos que las marcas [Opel y Vauxhall] estaban polvorientas, viejas y [eran] demasiado convencionales. Así que queremos ser audaces y puros. Suenan opuestos, pero es como el sabor agridulce: no deberían ir juntos, pero se sienten muy bien juntos. Progresividad e ingenio no son cosas que la gente hubiera pensado para Opel, pero es lo que queremos representar, ser progresistas y modernos», explica el diseñador jefe de Opel, Mark Adams.

«Puedes destrozar una marca de la noche a la mañana, pero es muy difícil llevarla a donde quieres estar. Estamos al principio del viaje. El Mokka es crucial, pero es solo el comienzo. Estamos dando pasos audaces hacia adelante y seremos consistentes a lo largo del camino». Los próximos Crossland, Grandland, Manta e Insignia continuarán esta senda.

Todos ellos mantendrán la característica calandra «Opel Vizor», que engloba grupos ópticos y parrilla bajo una única moldura transparente. «Opel carecía de una cara distintiva. Tenía una cara bonita, como la del Insignia, pero muchos otros transmitían una sensación similar. El Vizor es realmente importante. No es una calandra; es todo, incluidas las luces y la tecnología, lo que quieres representar».

Teaser del Opel Manta-e

El Manta será uno de los modelos más importantes de la «nueva» Opel

Uno de los modelos más importantes de la «nueva» Opel será el Manta, un crossover eléctrico que retomará el nombre de un añorado deportivo de los años 70 y 80. Este automóvil, cuyo lanzamiento está programado para el año 2026, condensará la esencia del nuevo diseño corporativo de Opel y se constituirá como una alternativa a rivales como el CUPRA Tavascan o el Volkswagen ID.5.

«Tenemos un ojo [puesto] en la historia para estar orgullosos de ella, pero nos enfocamos en el futuro y hacia dónde vamos. Hay cosas que se pueden tomar del pasado, pero no queremos ser un pastiche, [haciendo] modelos retro del pasado. Tomamos el espíritu y el ADN y los rehacemos para el grupo de clientes al que nos dirigimos. No puedes hacerlo todo, tienes que ser selectivo».

Fuente | Autocar

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