China vuelve a marcar el paso: en marcha la primera planta marina flotante eólica y solar del mundo
3 min. lectura
Publicado: 07/11/2022 17:04
La empresa estatal SPIC ha puesto en marcha la primera instalación de este tipo, que ha sido diseñada por Ocean Sun, de la cual también hereda su tecnología patentada. Dicho complejo tendrá una capacidad total de 20 MW en 2023.
Establecida en julio de 2015 a través de la reestructuración de la antigua China Power Investment Corporation y State Nuclear Power Technology Corporation (SNPTC), State Power Investment Corporation Limited (SPIC) es una gran empresa estatal dependiente del gobierno central de China.
Además, SPIC es la propietaria de activos fotovoltaicos más grande del mundo y ahora refuerza su posición con la puesta en marcha de la primera planta de energía fotovoltaica flotante comercial en alta mar del mundo. Además, esta planta lleva asociada un módulo de energía eólica, lo que la hace incluso más especial.
Cómo es la nueva planta solar flotante de SPIC
La instalación, situada frente a la costa de la provincia china de Shandong, está formada por dos flotadores provistos de paneles solares con una capacidad instalada de 0,5 MWp. Estos flotadores, a su vez, se conectan al transformador de un aerogenerador. Posteriormente, dicho complejo se comunica con la red eléctrica a través de un cable submarino.
El primer paso consiste en completar el período piloto, así como la demostración técnica y económica completa. Una vez superado, SPIC y Ocean Sun tienen previsto ampliar el proyecto para construir un proyecto fotovoltaico solar-eólico flotante con una capacidad total de 20 MW en 2023.
«Este es un verdadero hito para Ocean Sun y para la industria solar flotante», ha declarado el Dr. Børge Bjørneklett, CEO y fundador de Ocean Sun. «El exitoso proyecto financiado por SPIC y construido con la solución Ocean Sun muestra cómo se logrará el objetivo común de reducir las emisiones de CO2 de efecto invernadero con el desarrollo a través de las fronteras».
Este concepto permite a SPIC, así como a las corporaciones que lo desarrollen en el futuro, combinar dos tecnologías complementarias con el objetivo de incrementar la capacidad de producción de las instalaciones renovables. Además, supone un ahorro de coste logístico y de mantenimiento. Finalmente, reduce el impacto visual que tanto las granjas solares como las turbinas eólicas producen en tierra firme.
Fuente | Diario Renovables