España contará con una mina de níquel en 2024, clave para el futuro del coche eléctrico
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Publicado: 06/02/2023 11:36
Una de las principales preocupaciones en la expansión del coche eléctrico y las energías renovables, es la fuerte dependencia exterior de Europa. Una dependencia principalmente de China, que supone un riesgo para la transición energética. Ahora España quiere convertirse en una alternativa gracias a los proyectos para extraer y procesar litio, a los que ahora se sumará una nueva mina que explotará las reservas de níquel.
Esta nueva explotación se situará en la localidad de Aguablanca, Monesterio (Badajoz) que después de seis años cerrada ha recuperado la confianza de los inversores que han destacado el enorme potencial de esta debido al incesante incremento en la demanda de baterías.
Según declaraciones al diario El Economista, la empresa propietaria de la mina, Río Narcea Recursos, la previsión es comenzar las labores de adecuación este mismo otoño para que vuelva a estar operativa antes de septiembre de 2024.
Uno de los pasos previos era la publicación en el BOE del anuncio del sometimiento a información pública del plan de restauración de la mina. Algo que se ha producido esta pasada semana según ha confirmado el Ministerio para la Transición Ecológica. «Se trata del último paso administrativo para iniciar su reapertura«, indican fuentes de la empresa.
Como recordamos, en el año 2016 la empresa española Sacyr compró los derechos mineros en España de la por entonces propietaria de la explotación, la canadiense Lundin Mining, a la espera de que el precio del níquel se recuperase.
Pero en 2021, Sacyr vendió los derechos de explotación de la mina a Río Narcea, en manos de sociedades inversoras de los empresarios Alejandro Ayala, Mario Celdrán e Íñigo Resusta, vinculados a su vez al grupo Phi4tech.
Un nombre que a muchos les sonará por estar relacionada con los proyectos para levantar grandes fábricas de baterías para coches eléctricos en España, con una instalación que tiene como objetivo alcanzar una producción anual de 10 GWh, unos 160.000 packs de 60 kWh al año, y que se ubicará en Badajoz.
Un proyecto integral de almacenamiento energético
Este proyecto se engloba en una iniciativa integral que espera movilizar más de 1.000 millones de euros y crear 1.300 puestos de trabajo directos en hasta cuatro instalaciones.
Esto incluye además de la mina de níquel de Aguablanca, también el desarrollo de la mina de litio en la mina de Las Navas, Cáceres, la construcción de la fábrica de baterías de Badajoz, y la construcción en la provincia de Cáceres de una factoría de cátodos.
La construcción de la mina de litio de Las Navas se iniciará según las previsiones durante el segundo semestre de este año, con el objetivo de iniciar la producción de hidróxido de litio en mayo de 2025, mientras que la construcción de la fábrica de baterías debería arrancar previsiblemente en marzo de este año, con la previsión de iniciar la producción de celdas en 2023.
Pasos críticos que permitirá no sólo a Europa diversificar sus fuentes de suministro de componentes clave, sino colocar a España, y Portugal, como referencias energéticas y de producción de componentes como baterías. Una producción que además suele atraer la inversión para la fabricación de coches eléctricos, que buscan estar cerca de las propias líneas de producción de baterías.