Tesla y Rivian irán a juicio por el supuesto robo de tecnología secreta, a pesar de colaborar juntos

La demanda inicial que Tesla interpuso en junio de 2020 a uno de sus grandes rivales en Estados Unidos, Rivian, prospera. El fallo de un juez estatal permite a la compañía de Elon Musk seguir adelante con su acusación de robo de información y tecnología secreta por parte de ex empleados que se fueron a trabajar a Rivian Automotive.

Este juez dijo no a la petición de estos ex empleados de Tesla que pedían la desestimación de la demanda a través de un fallo de adjudicación sumario, por lo que el caso sigue adelante. La acusación inicial iba precisamente contra estos ex empleados por violar los acuerdos de no divulgación relacionados con «secretos comerciales».

Tesla y Rivian, que actualmente colaboran al apostar esta última para la adopción del conector NACS del primero para sus coches eléctricos a partir del 2025, irán finalmente a juicio al no poder resolver el caso fuera de los tribunales. Obviamente, desde Rivian han negado siempre las acusaciones y han acusado a Tesla de intentar torpedear a cualquier atisbo de competencia.

La primera demanda de Tesla data del 2020, cuando la compañía de Elon Musk acusó a Rivian de robar secretos comerciales contratando a ex empleados y alentándolos a robar y llevarse documentos sensibles sobre ingeniería de propiedad e información confidencial. Un año después, Tesla amplió la demanda alegando que, además, Tesla estaba robando la tecnología central de sus baterías de nueva generación.

Tesla tiene ahora vía libre para seguir adelante con su demanda, en el que será un juicio entre los quizás dos fabricantes de coches eléctricos más importantes en Estados Unidos (Tesla lo es, sin duda), en un nuevo caso de supuesto robo de información confidencial y de traspaso de secretos tecnológicos de una marca a otra fichando ex empleados.

Por un lado, Tesla, fabricante asentado y sin duda el más poderoso en el mercado de los coches eléctricos a nivel mundial, asentado en su mercado local, Europa y China con sus propias Gigafábricas; y además, con el coche eléctrico más vendido del mundo en su gama, el Model Y. Y por el otro, Rivian, que únicamente tiene en su gama dos modelos: el R1S y el R1T, este último convertido en el primer pick-up eléctrico del mercado.

Fuente | Bloomberg