Lamborghini todavía no ha decidido si apostará por los e-fuels o por la electrificación para sus superdeportivos
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Publicado: 27/10/2023 11:36
Lamborghini lanzará su primer coche eléctrico, el gran turismo Lanzador, en el año 2028. Tras él llegará la segunda generación del SUV Urus, prevista para 2029. Con estos dos modelos, la mitad de su gama estará compuesta por BEV (Battery Electric Vehicles); sin embargo, ¿qué ocurrirá con los superdeportivos Huracan y Revuelto?
El CEO de la marca, Stephan Winkelmann, ha declarado durante una reciente entrevista que la empresa «puede permitirse el lujo de dejar la puerta abierta todavía durante unos años. Los coches deportivos con combustibles sintéticos serían un salto más fácil para nosotros, pero tenemos que esperar y ver qué deciden los legisladores al respecto y si podemos llegar a un acuerdo global sobre su viabilidad.
El plan es que nuestros modelos cotidianos (el SUV Urus y el nuevo gran turismo Lanzador) sean ambos totalmente eléctricos para finales de la década. En el caso de los superdeportivos, seremos híbridos, y esos coches vivirán ocho o nueve años a partir de ahora (hasta principios de la década de 2030).
Dado que un ciclo de desarrollo típico para un nuevo coche deportivo es de cuatro años, todavía tenemos algo de tiempo para observar y esperar hasta que la situación se aclare. Ciertamente vemos una clara tendencia de nuestros compradores más jóvenes hacia la sostenibilidad. La huella general de nuestra marca en términos de emisiones por volumen es insignificante, pero nuestro sentido de responsabilidad social es mucho mayor y tenemos que honrarlo».
Para Lamborghini, los coches eléctricos terminarán siendo incluso más emocionales que sus equivalentes térmicos
A pesar de los momentos de incertidumbre que atraviesa la industria europea debido a la transición a la movilidad eléctrica, Winkelmann no se muestra intimidado; de hecho, está convencido de que los superdeportivos eléctricos terminarán siendo incluso más emocionales que los térmicos, en parte debido a sus asombrosas prestaciones.
«Personalmente, no he decidido si prefiero combustibles sintéticos o baterías para los superdeportivos. Para los modelos de conducción diaria, realmente no existe ninguna alternativa a los vehículos eléctricos. Mi duda sobre los combustibles sintéticos tiene que ver únicamente con la escalabilidad. En 2035, todavía habrá miles de millones de automóviles en las carreteras con motores de combustión interna, y si queremos marcar la mayor diferencia en las emisiones globales, la mejor manera de hacerlo, en teoría, es con combustibles sintéticos. Pero no estoy convencido de que eso sea viable«.
Fuente | Autocar