Dacia baja un 11% el precio del Spring después de quedarse fuera de las ayudas públicas en Francia

Que las ayudas públicas son una buena medida para rebajar los precios de los coches eléctricos es algo que cada vez tiene menos unanimidad. Y es que no hay más que ver qué sucede cuando un coche se queda sin ellas por alguna razón. Que baja mágicamente de precio. El último ejemplo es el Dacia Spring, que al no poder acceder a las ayudas en Francia, ha recortado automáticamente sus precios un 11%.

Hasta ahora, el Spring arrancaba en el país galo en los 20.800 euros. A estos, los interesados podían restar los 5.000 euros que ofrecía el estado. 

Pero las nuevas normas para acceder a estas ayudas, ha expulsado a los coches fabricados fuera de Europa. Y en el caso del Spring, este llega desde China, por lo que desde el 1 de enero de este año no puede acceder a los subsidios públicos.

Para tratar de minimizar daños, Dacia ha decidido recortar el precio del Spring hasta los 18.400 euros. Algo que supone en la práctica un descuento de 2.400 euros. Una cifra más atractiva que la anterior, pero que le dejan lejos de los jugosos 15.800 euros que podía ofrecer antes del cambio legislativo.

El principal problema para el Spring, es que a la vuelta de la esquina está la llegada de una dura competencia.

Por ejemplo, esta próxima primavera llegará al mercado el nuevo Citroën ë-C3 . Este comienza en 23.300 euros, pero tendrá derecho al bono de 4.000 euros que tendrán los franceses disponibles. Por tanto, tendrá un precio similar al Dacia, 19.300 euros, pero con unas mejores prestaciones ya que el Citroën cuenta con un motor mucho más potente, 113 CV, y una batería que le lleva hasta los 320 km WLTP, frente a los 230 km del Dacia.

Con esta rebaja, Dacia espera poder ganar tiempo antes de la llegada de la renovación del Spring, que se espera para el otoño de este año.

Una nueva versión que llegará con novedades en cuanto a diseño, acabados y calidades, pero también en el aspecto de las baterías, donde se espera que adopte las económicas celdas LFP, que le permitirán ser más competitivo en este aspecto.

Pero sin duda el cambio más radical podría ser su lugar de producción, ya que todo indica que Dacia deslocalizará su fabricación en China para ensamblarlo en Europa, para de esa forma recuperar el acceso a los programas de ayudas públicas.