
Las marcas ya lo piden abiertamente a Europa, quieren derribar la prohibición de los motores de combustión en 2035
La carta enviada por ACEA a la presidenta de la Comisión Europea es muy explícita de cara a la próxima reunión que se producirá en septiembre. Las marcas pedirán oficialmente que se modifique el camino hacia la electrificación total del parque automovilístico en Europa.

Apúntate esta fecha en el calendario: 12 de septiembre, momento en el que se producirá una esperada e importantísima reunión que podría cambiar el rumbo de la industria automovilística para el medio y largo plazo. Ese día tendrá lugar un "Diálogo Estratégico" sobre el futuro de la industria automovilística europea, en el que las marcas y la Comisión Europa debatirán sobre el camino a seguir de aquí a las próximas décadas.
Antes de esa cita, desde ACEA, la asociación de fabricantes europeos, han querido mostrar sus cartas. En un documento firmado por el presidente de ACEA, el también CEO de Mercedes Ola Kallenius, así como por el director de CLEPA, Matthias Zink, en representación de los proveedores, se han dirigido a la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen. Los actores del sector automovilístico han lanzado varios mensajes muy, muy claros.
«Cumplir con los rígidos objetivos de CO2 para coches y furgonetas en 2030 y 2035 es, en el mundo actual, simplemente inviable», aseguran en la carta, y van más allá. «El próximo Diálogo Estratégico es el momento de cambiar de rumbo. Esta es la última oportunidad de la UE para ajustar sus políticas a las realidades actuales del mercado, geopolíticas y económicas, o corre el riesgo de poner en peligro una de sus industrias más exitosas y competitivas a nivel mundial. Compartimos un destino común, pero el viaje requiere más pragmatismo y flexibilidad para mantener en marcha el motor del sector automotriz europeo».
Sabíamos que la reunión que estaba prevista entre la UE y los fabricantes de coches podría empujar a los máximos dirigentes de la región a un replanteamiento de su estrategia de cara al 2035, año en el que ya no se podrán vender coches que tengan motor de combustión en Europa. Los fabricantes alertan a Europa de que se corre el riesgo de fracasar en su transición hacia el vehículo eléctrico si solo se centran en los objetivos de CO2 y sin tener en cuenta las dificultades industriales y de mercado.

Hay varios factores en juego: la dependencia casi total de Asia en materia de baterías, los recientes aranceles del 15% en Estados Unidos, los cada vez mayores costes de fabricación y una infraestructura de carga desigual en Europa, donde la cuota de mercado de los coches eléctricos es, a día de hoy, del 15%. «Insuficiente» para ACEA, con muchas dudas todavía en los consumidores. Motivos más que suficientes para plantear un cambio de rumbo en Europa y valorar otras tecnologías alternativas.
Las marcas piden una mayor flexibilidad tecnológica: «Los vehículos eléctricos liderarán el cambio, pero también debe haber espacio para los híbridos enchufables, los extensores de autonomía, los vehículos con motor de combustión interna de alta eficiencia, el hidrógeno y los combustibles descarbonizados». ACEA pone sobre el papel una petición que muchos dirigentes llevan reclamando en los últimos meses.
«Queremos que esta transición funcione, pero nos frustra la falta de un plan político holístico y pragmático para la transformación de la industria automotriz. Actualmente, la UE regula a los fabricantes en cuanto a la oferta de nuevos vehículos, pero no proporciona las condiciones necesarias para viabilizar la transición. Los mandatos legales y las sanciones no impulsarían la transición. Como fabricantes y proveedores de automóviles, estamos comprometidos a ayudar a la UE a alcanzar el objetivo de emisiones netas cero en 2050».
ACEA ha lanzado un mensaje claro y contundente a Europa. Ahora habrá que esperar al 12 de septiembre para conocer cómo transcurren las negociaciones, si las hay. ¿Creéis que la Comisión retrocederá en sus planes? Ya dio un paso atrás flexibilizando las exigencias de reducción de emisiones de CO2 para este año. Veremos qué sucede en esta ocasión.