
¿Qué pasa si le cae un rayo a un coche eléctrico? Este BYD ha sobrevivido a tres seguidos
Un coche eléctrico de BYD ha soportado tres rayos consecutivos mientras circulaba, sin que su conductor sufriera daños ni su sistema eléctrico resultara afectado. El efecto jaula de Faraday y el diseño del vehículo fueron claves para su integridad. Las autoridades recomiendan seguir protocolos estrictos tras un impacto de este tipo

En China, un BYD Song eléctrico ha protagonizado un insólito suceso que ha sorprendido tanto a conductores como a expertos. Mientras circulaba por el área de servicio de Tieshan, en Beihai (Guangxi), el vehículo fue alcanzado tres veces de forma consecutiva por un rayo. Las cámaras de salpicadero de coches cercanos captaron el momento, mostrando destellos y arcos eléctricos al impactar en el techo.
A pesar de la violencia de las descargas, el conductor permaneció ileso y pudo salir del coche sin lesiones. Los técnicos que inspeccionaron el vehículo confirmaron que el sistema de las “tres eléctricas”, batería, unidad de control y motor, no sufrió daños. Sí se localizaron dos puntos de impacto visibles en la zona del techo, pero el resto de la carrocería estaba intacta.
Según los especialistas consultados por medios chinos, la explicación está en el efecto jaula de Faraday. La carrocería metálica actúa como una barrera que canaliza la corriente hacia el suelo, manteniendo a los ocupantes a salvo al compartir el mismo potencial eléctrico que el chasis. Por ello, el interior de un coche cerrado puede considerarse un refugio seguro durante una tormenta eléctrica.
No obstante, se recomienda que, tras un impacto de este tipo, los ocupantes no abandonen el vehículo de inmediato y soliciten asistencia profesional. Las pautas de seguridad incluyen apagar todos los dispositivos electrónicos y cerrar completamente las ventanillas para garantizar el aislamiento. Además, salvo que haya un incendio o riesgo vital, lo más seguro es esperar 30 minutos tras el último impacto antes de salir.
Este incidente no solo pone de relieve la resistencia estructural de los coches eléctricos modernos, sino también la importancia de conocer y seguir los protocolos de seguridad cuando una tormenta eléctrica nos sorprende en la carretera.
Fuente | Sycaijing