Yoann Nussbaumer es el fundador del blog Automobile-propre, una de las referencias en cuanto a movilidad eléctrica en Francia, y residente en la norteña y zona de Estrasburgo, donde estos días el frío aprieta, y momento ideal para realizar una prueba de invierno del más pequeño de la gama ZE de Renault.
Yoann conduce habitualmente un Nissan Leaf, por lo que los coches eléctricos no son algo nuevos para el, incluso ha estado en la prsentación del Renault Twizy en ibiza el pasado verano, por lo que su experiencia con este tampoco es nueva. La idea es experimentar durante dos días la conducción del Twizy por las frías carreteras de Estrasburgo y comprobar si este es un vehículo válido incluso en los días más fríos del año.
Con 5 grados bajo cero en el marcador, la ropa es un elemento imprescindible para conducir el Twizy en esta zona, y es por eso que de camino a su trabajo, tanto una buena chaqueta, como unos buenos guantes se antojan como elementos que no pueden faltar a la hora de conducir este modelo.
Su casa y su trabajo están separados por 30 minutos de conducción con el Twizy, un recorrido donde las protecciones del coche parece que hacen bien su trabajo, y solamente se queja de los humeantes tubos de escape de los coches que lo preceden, algo realmente desagradable en los atascos. Al llegar a su lugar de trabajo, nota que los dedos a pesar de los guantes están bastante fríos, por lo que queda confirmado que en invierno, es muy recomendable usarlos.
La primera impresión es que bajo malas condiciones climatológicas, el Twizy es soportable durante los primeros 20 kilómetros, después la sensación de frío puede llegar a ser desagradable para algunos, aunque para esos Renault ha desarrollado algunas soluciones, como la famosa manta térmica.
Otro aspecto muy interesante que nos comenta Yoann es la sensación que tiene el ocupante de la plaza trasera en estas condiciones climatológicas, y para eso anima a su mujer a ocupar ese espacio y acudir al mercado de Estrasburgo. La sensación de esta se resume en que con una buena protección la parte de arriba del cuerpo permanece con una buena temperatura, pero el problema son las piernas, que reciben las filtraciones de los espacios existentes en las puertas, y que al final ha resultado el principal problema.
En cuanto a la autonomía en invierno, esta a pesar de que el Twizy no cuenta con sistema de climatización, también ha bajado de forma notable, y si en verano durante su prueba del Twizy ha llegado a realizar 70 kilómetros por las carreteras de Ibiza, en invierno esta cifra cae hasta los 50 kilómetros por culpa del frío reinante en la zona.
El resumen es que incluso en los días más fríos, el Renault Twizy es un vehículo válido para el día a día, aunque su propietario deberá tener en cuanta algunos parámetros, como abrigarse bien y prepararse para sorpresas como encontrarse el asiento nevado o mojado, algo que tiene fácil solución en casa con un simple trapo, pero que puede darnos más de un problema cuando no tenemos nada a mano para secarlo.
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