Guerra de coches eléctricos en Pamplona

Esta es una curiosa historia que uno de nuestros lectores nos envía desde Pamplona, donde como en todas las ciudades, poco a poco se están viendo coches eléctricos por sus calles, además de comenzar una tímida expansión de los puntos de recarga y con ellos, la llegada de los primeros conflictos.

La cuestión es que nuestro amigo circulaba con su Renault Twizy por en centro de la capital navarra cuando con la batería al 3% se ha dirigido a uno de los pocos puntos de recarga de la ciudad, donde para su sorpresa se ha encontrado a un Peugeot iOn estacionado, pero sin estar recargando, algo muy poco cívico y que no está permitido por la normativa.

Después de unos minutos esperando, el conductor del Twizy ha tenido que buscarse la vida para estirar al máximo el cable del pequeño Renault hasta alcanzar con mucho esfuerzo el punto de recarga y lograr de esa manera recuperar algo de la capacidad de la batería.

Después de un rato llama al guardia que como suele suceder en estos casos, no sabe como proceder por ser algo realmente nuevo, motivo por el cual debe realizar una llamada a la central, que le confirma que un coche eléctrico no puede estar estacionado en una plaza para recarga sin estar enchufado, por lo que proceden a llamar a la grúa y suponemos que proceder a la primera retirada de un coche eléctrico de una plaza reservada para este tipo de vehículos en nuestro país.

No deja de ser una anécdota, pero por lo menos a los responsables del concesionario de Peugeot que han sacado el iOn para promocionarlo habrán aprendido que ante la poca proliferación de puntos de recarga, deberían ser un poco más solidarios y una vez terminada la operación, deben mover el coche para dejar libre el espacio, ya que en este caso el perjudicado ha sido un Twizy, que puede colarse por cualquier hueco y recargar, pero sería algo imposible para un turismo de tamaño normal.

Gracias a nuestro lector por las fotos y la historia.

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