Probamos el MIA electric Paris (Parte I) MIA vendrá a España

Nos reunimos con Alain Fadie, representante de MIA electric en Europa, que nos invita a probar el pequeño eléctrico francés y se presta a numerosas preguntas sobre su uso y su distribución. Entre ellas una muy directa: ¿por qué mia no está en España?

Lo estará, muy pronto. Nos explica la nueva política de empresa y la bajada de precios, así como las razones por las que no está en España y los planes para su llegada en los próximos años.

Las grandes berlinas se empujan en el denso tráfico de las 5 de la tarde. Bélgica no es Suiza, pero es un país con grandes coches de empresa y de familias con economías holgadas. Aquí se han vendido ya cerca de las 70 unidades mientras que en su país de origen, entre flotas y servicios de alquiler corto, son más de 700. Siendo un vehículo económico ¿Por qué mia electric no está en España? «Porque hace muy buen tiempo».

El reto del MIA electric es conseguir un coche muy ligero para poder moverlo con un motor pequeño y evitar así caras y pesadas baterías. Esto además reduce los tiempos de carga. Y realmente lo han conseguido. Con una batería de 12 kWh y un motor de 18 kW (24 CV) puede recorrer hasta 125 km. Pesando un 86% más que el Twizy (815 contra 450 kg) consume 96 Wh/km, tan solo un 37% más que el cuadriciclo para dos personas de Renault.

Alain me explica cómo ha cambiado la política de la empresa con el nuevo accionista mayoritario. La apuesta es mucho más fuerte, se basa en reducir los costes haciendo pedidos mayores a los proveedores y poder así vender más al ser más baratos. MIA electric ha reducido sus precios a la mitad con esta estrategia y ya tiene los primeros resultados, como la firma de un importante contrato con la multinacional EDF que sumará 100 MIA electric a su flota de empresa. La producción no es un problema, la histórica fábrica de Heuliez, en Cerizay, tiene capacidad para producir más de mil unidades al mes.

Ponemos la calefacción y apretamos un botón en el minimalista salpicadero para desempañar el cristal delantero. Resulta efectivo, pero las ventanillas laterales siguen empañadas y no puedo ver el retrovisor. «En los nuevos modelos el sistema de ventilación está mucho mejor diseñado«, disponen de sendos aireadores que pueden ser dirigidos a las ventanillas triangulares delanteras. Justo ayer fue el verano de Bélgica, 37 grados, habría sido peor ya que el MIA París no tiene aire acondicionado.

«No se puede vender un coche en España sin aire», Alain lo sabe bien, ha vivido muchos años en Barcelona. Pero MIA electric ha trabajado en ello y está preparada para integrar el aire acondicionado en los modelos que vendrán a España. No puede concretar qué tipo de sistema usaran, aunque dudo que sea la bomba de calor. El MIA se compone de muchas piezas genéricas para reducir precios. Ahí otra limitación en el diseño, que aun así esta ciertamente muy logrado.

Pero aún quedan cosas por concretar para su venta en la piel de toro. Lo primero era saber con qué ayudas del gobierno contará este modelo, algo que no parece estar nunca del todo claro y que probablemente esté dejando fuera a más empresas. Lo siguiente es el distribuidor, si lo harán a través de una gran marca con una red de concesionarios, con un distribuidor pequeño o con sus propios agentes. Es cuestión de negociar y eso puede llevar tiempo.

El MIA electric no es un concepto, es un coche real y muy práctico que puede cubrir las necesidades diarias de la mayoría de los usuarios, por lo que encontrará su lugar en el mercado de los microcoches en España. En las próximas dos entradas hablaremos sobre su uso y su diseño.

Muchas gracias a MIA electric por facilitarnos la prueba y en especial a Alain Fadie por ponerse en contacto con nosotros, por su tiempo y su amabilidad.

Segunda parte de la prueba

Nota: mia electric es una marca comercial y se escribe con minúsculas, igual que adidas, eDreams o iPad, algo aceptado por la RAE como una excepción a la regla ortográfica general. mia ha sido cambiado en el texto por MIA para facilitar la lectura y por cuestiones de tags.