¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

Desarrollan un prototipo de batería inteligente. Menor coste y más autonomía con la actual tecnología

cell

Un equipo del Instituto de Instituto de Ingeniería de Producción y Automatización de Fraunhofer, Stuttgart, han presentado los primeros resultado de un interesante trabajo relacionado con las baterías para coches eléctricos.

Se trata de un micro-controlador que se instala en la propia celda. Esto permite llevar un control individual de cada una de las celdas que forma una batería de una forma mucho más precisa. De esta forma el sistema puede saber aspectos como el calor, pero también la capacidad exacta de cada celda.[blocktext align=»left»]Graphenano anuncia el inicio de la fabricación de polímero de grafeno [/blocktext]

Según el equipo de desarrollo, esto permite al sistema aprovechar al máximo la capacidad de cada celda. Algo que no sucede cuando estas están conectadas en serie y controladas por un único elemento que da como resultado que muchas veces una celda disponga de carga, pero no pueda usarla por culpa de otras que la han agotado.

Otro de los problemas de los sistemas actuales es que si una celda falla, el vehículo se puede detener y dejar de funcionar. Algo que se evitaría con esta tecnología que simplemente aislaría la celda defectuosa permitiendo al vehículo mantener su funcionamiento, simplemente con menor carga en la batería.

Esto también tendría su impacto en el coste de las reparaciones de las baterías para el usuario. La diferencia entre acudir a cambiar una única celda, y cambiar varias decenas no será tan grande ya que una buena parte del coste será la mano de obra de desmontar la propia batería.

Según el Dr. Kai Pfeiffer, encargado del grupo de investigación.

«Dependiendo de la calidad de la celda, podemos incrementar la autonomía un mínimo del 4%. Con el paso del tiempo este efecto se incrementará. En las baterías viejas las celdas degradadas podrán ser sustituidas de forma individual, logrando de esa forma un incremento del 10%.«

Esta tecnología también permitirá reducir los costes de fabricación. Según los diseñadores de este sistema, al no correr el riesgo de que el fallo de una celda pueda detener el funcionamiento del coche, permitirá a los fabricantes de baterías un ensamblado más sencillo, rápido y económico.

Ahora mismo los desarrolladores están trabajando en la reducción del tamaño de la electrónica, y de su precio. Estiman que este podría llegar a menos de un euro por celda.

Fuente | Fraunhofer

 

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame